Augas de Galicia ha solicitado al Concello de Pontevedra ampliar hasta el 30 de junio el plazo previsto en el segundo convenio de saneamiento del rural -firmado en abril del 2010- para licitar las obras. Concretamente, el departamento autonómico tiene pendiente la ejecución del nuevo colector del Gafos, una obra que costará algo más de un millón de euros y que el organismo autonómico dejó en suspenso hace más de año y medio por supuestos defectos en los informes pasados por el Concello.
De hecho, la obra fue adjudicada por la Xunta en abril del 2011, pero unos meses más tarde se dio marcha atrás y se anuló la actuación. Augas de Galicia argumentó a principios de este año que había errores de medida en el proyecto, que había sido elaborado por el Concello, ya que el caudal del agua que recibe el colector en días de lluvia quintuplica las previsiones, algo que se achacó a la existencia de conexiones irregulares a la red.
Desde que quedó en suspenso la adjudicación, Augas de Galicia ha venido trabajando en un nuevo diseño del proyecto. El gobierno local, que siempre negó la versión del organismo autonómico y achacó el retraso de la obra a la necesidad de «redimensionar» el colector para que dé cobertura al futuro hospital de Monte Carrasco, anunció ayer que no tiene reparos en la ampliación del plazo para licitar la obra, algo que obligará a firmar una adenda al convenio original.
Este incluía obras a cargo de la Xunta por valor de siete millones de euros, mientras que el Concello se responsabilizaba de otros tres millones. Con excepción de la del Gafos, el resto de actuaciones están en marcha.
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