Seis de las siete sociedades representadas en el Consejo de Pesca del Principado, el órgano consultivo donde se debate la normativa de pesca que cada año rige este deporte en Asturias, enviarán antes de mañana sus propuestas al Gobierno del Principado, de Foro Asturias, con la intención de que la Administración endurezca un poco su propuesta inicial, que plantea una normativa de pesca abierta en la que la temporada durará desde el tercer domingo de marzo al 31 de julio, sin un solo día de veda. Además, cada pescador podrá capturar tres salmones por semana.
El primer consejo de pesca celebrado en Asturias desde que Foro entró en el Gobierno se celebró en Oviedo el jueves, y aunque de las siete sociedades con representación en el consejo sólo dos («El Esmerillón» y «La Socala») se mostraban partidarias a que la normativa propuesta por Foro Asturias saliese adelante tal cual, el consejo tuvo poco de consultivo. Al menos, es lo que asegura la mayoría de las sociedades presentes, que afirman que el viceconsejero de Recursos Autóctonos, Luis Peláez, se mantuvo firme en su propuesta y alertando, nada más entrar en la reunión, dos cosas: que el consejo de pesca es meramente consultivo y que Foro Asturias ya había dejado claro en su programa electoral que la norma de pesca sería mucho más abierta que los reglamentos anteriores.
El Gobierno del Principado, cuando estaba dirigido por el PSOE e IU, propuso en las dos últimas temporadas de pesca una norma muy estricta, debido al descenso de las capturas, que tocó fondo cuando en 2009 se sacaron 356 salmones en una temporada tradicional con más de cuatro meses de actividad. Así, en 2010 y 2011, en Asturias se impuso la modalidad de pesca sin muerte durante un mes y medio, tal y como existe en otros países europeos de gran tradición salmonera, como es el caso de Islandia, y además se estableció el cupo máximo por aficionado y temporada de ocho salmones en 2010 y tres en 2011. El cambio tuvo sus detractores, pero la mayoría de aficionados acató las modificaciones como única manera de favorecer la conservación de la especie. Eso sí, los pescadores también reclamaron más controles de depredadores, como los cormoranes, una refuerzo de la lucha contra el furtivismo y controles en los cauces ante los problemas de contaminación. Muchos de los aficionados tuvieron la sensación de que mientras ellos arrimaban el hombro para salvar la especie, el Principado no cumplía su parte del trato. Sin embargo, otro sector de pescadores, la mayor parte de ellos ribereños, reclamaba que la norma no fuese tan estricta, al argumentar que la especie tiene ciclos y que era normal que hubiese algunos años de escasas capturas.
Ahora, con el borrador de Foro Asturias sobre la mesa, las sociedades de pesca enviarán sus propuestas, eso sí, mucho más descafeinadas de lo que pretendían, ya que son conscientes de que la Administración no está dispuesta a negociar. De hecho, uno de los colectivos más conservacionistas, la sociedad canguesa «Fuentes del Narcea», se retira de la lucha en busca de una normativa más restrictiva. Román Herrero, portavoz de esta sociedad, lo explica: «No tenemos esperanza, así que la normativa será sólo responsabilidad de la Administración».
Como apunte, destaca que incluso los colectivos más defensores de la norma abierta, «El Esmerillón» y «La Socala», solicitarán que por lo menos se implante la veda total los jueves, para que el río descanse. «Las Mestas del Narcea» solicitará a Foro Asturias que modifique el sistema de cupos y que se permita un máximo de ocho salmones por temporada y aficionado, en contra de los tres ejemplares que aparecen como tope semanal en el borrador presentado ante el consejo. Además, esta sociedad pide que se cobre el canon verde, que pagarían los aficionados y que serviría para poner en marcha una guardería específica de ribera, encargada de la lucha contra el furtivismo, entre otras cuestiones. «Las Mestas del Narcea» también propone que lo ideal «sería que se hiciese un recuento de salmones en cada uno de los ríos y después se estableciese un cupo específico en cada curso, en relación a la población de cada cauce», y solicita que el mes de julio sea sólo de pesca sin muerte, además de dos días de veda total a la semana.
El último recuento de salmones que se realizó en Asturias presentó una realidad preocupante. Tras cerrarse la temporada, quedaban vivos en todos los ríos asturianos menos de cuatro mil salmones, pero mientras que el Sella ofrecía datos bastante positivos, otros ríos como el Esva ni siquiera contaban con los 600 salmones que, según los expertos, son necesarios para garantizar el relevo generacional. «Esto debería tenerse en cuenta, no todos los ríos son iguales, pero es necesario hacer un recuento serio», explica el presidente del colectivo, Celestino Pérez. Sin embargo, a pesar de que el Esva ofrece datos que apuntan a una recesión clara del salmón, la sociedad de pescadores valdesana de «La Socala» es una de las defensoras de la normativa que propone Foro Asturias. Gil Rico, portavoz de este colectivo, explica que su única propuesta al Principado será vedar el jueves. «El problema del salmón no es el pescador, son las riadas, los vertidos... ya hubo años de bajas capturas y después se recuperó la población», explica Gil Rico. Arturo Álvarez, presidente de la sociedad «Amigos del Nalón», otra de las sociedades defensoras de la pesca sin muerte, propondrá a la Administración «un cupo de tres salmones por temporada, aunque tampoco nos opondríamos a ocho piezas. Y que se veden las zonas altas para favorecer el desove. Plantearíamos más restricciones, pero la Administración ya dejó bien clara su postura». «El Esmerillón», la sociedad más numerosa del oriente de Asturias, también defensora de que la normativa no contemple más restricciones, sí que enviará una propuesta: «Que se veden los jueves», explica Antón Caldevilla, presidente del colectivo. «El resto nos parece bien», remata Caldevilla. José Luis Augusto, del «Maravayu», también apunta que percibió en el consejo que la Administración «no tiene intención de reformar la propuesta, pero, aun así, propondremos algunos cambios, no muy tajantes, como que se veden, al menos, los jueves y que sólo se pueda pescar un salmón por cada titular del coto». La Real Asociación Asturiana de Pesca Fluvial, el colectivo más numeroso y antiguo de pescadores de España y defensor de la modalidad sin muerte, solicitará «cupos restrictivos, por lo menos ocho por temporada, aunque lo ideal sería que fuesen tres.
Además, queremos que haya una parte de la temporada sin muerte y que en el resto se impongan restricciones. Deberían vedarse los lunes y los jueves», explica Avelino Menéndez, portavoz de esta sociedad.
Todos esperan que sus propuestas estén mañana en la mesa de Luis Peláez y que el día 1 de noviembre, a más tardar, la nueva normativa de pesca recoja ya algunas de sus ideas.
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