La asociación ecologista Adega alertó ayer de la existencia de contaminación por metales pesados en el entorno de la piscifactoría que Stolt Sea Farm tiene en Quilmas (Carnota) y aseguró que el Juzgado de Instrucción número 1 de Muros abrió diligencias previas contra la empresa acuícola por un presunto delito contra los recursos naturales y el medio ambiente.
Las diligencias, explicó la organización ecologista, se incoaron como consecuencia de la denuncia presentada por la cooperativa de agricultura ecológica Rainha Lupa de Quilmas, en la que alertaba de presuntos vertidos de la granja de cultivo que contaminaban una finca vecina de más de 800 metros cuadrados.
Los denunciantes aportan un informe del Departamento de Química Física e Ingeniería de la Universidade da Coruña que confirma que los terrenos están contaminados por "metales pesados y sustancias salinas procedentes de residuos industriales". Adega asegura que este estudio demuestra que la acuicultura industrial "no solo contamina el mar con residuos orgánicos, antibióticos y productos químicos, sino que también envenena la tierra".
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