Aumentar las poblaciones de salmónidos en los ríos para restaurar su riqueza natural es uno de los «objetivos fundamentales» del Gobierno regional. Para ello, los centros de alevinaje de Asturias disponen de 1,8 millones de alevines de trucha y un millón de salmón, lo que supone «un 500% más que las repoblaciones que se hicieron a lo largo de 2011». Así lo anunció ayer el viceconsejero de Recursos Autóctonos, Luis Peláez, durante la presentación de la XIV Feria del Salmón de Cornellana, que se celebrará entre los días 16 y 18.
Para llevar a cabo las sueltas y garantizar el ciclo vital de las especies, Peláez hizo un llamamiento a la colaboración a las asociaciones de pescadores y a entidades como la Universidad de Oviedo y señaló que las actuaciones que deben realizarse para recuperar los ecosistemas fluviales no pueden quedar ahí. De hecho, señaló que el Principado aumentará los controles sobre las especies depredadoras, aumentará la vigilancia de los recursos e intervendrá para reducir la contaminación de las aguas.
Y es que, según explicó, «los problemas de las poblaciones piscícolas no son responsabilidad de los pescadores de caña, sino de múltiples factores como el furtivismo, las capturas indiscriminadas en el mar, la contaminación, los desequilibrios entre poblaciones piscícolas y depredadores y el abandono en la gestión de los ecosistemas».
Por eso, defendió que la normativa de pesca que regulará la temporada que se abrirá el día 18 (cuando se espera celebrar en Cornellana la tradicional subasta del campanu) «tiene por objetivo un equilibrio entre las zonas vedadas, las zonas libres y las acotadas y entre las diferentes modalidades de pesca».
Pero además de la pesca, la próxima edición de la Feria de Salmón incluirá otras actividades. De hecho, el Ayuntamiento de Salas ha programado la primera edición del certamen Capenastur, dedicado también a la caza, la naturaleza y el turismo activo: «Puede parecer arriesgado, pero en estos tiempos hay que agudizar el ingenio al máximo», indicó el alcalde, Sergio Hidalgo, quien subrayó que el tradicional certamen de Cornellana «ha pasado por muchos avatares, pero lo importante es su supervivencia y continuidad, su crecimiento e innovación». Así, el recinto de la feria, que este año abandona el claustro del monasterio de Cornellana para trasladarse a la zona conocida como Prado del Convento, acogerá exhibiciones de cetrería, tiro con arco y detección de venenos y explosivos con perros y un concurso de rastro. Entre los más de 60 expositores que participarán en Capenastur, que se completará con un certamen de pinchos de salmón organizado por la hostelería local, también habrá lugar para una piscina de pesca y un rocódromo: «Asturias es un referente nacional en escalada y no puede vivir de espaldas a ella», explicó el director de Deportes, Marcos Niño.
Con todo, la subasta del campanu está llamada a ser el principal atractivo de la feria. Como cada año, ante la imposibilidad de saber cuándo será echado a tierra el primer salmón de la temporada, se han programado dos pujas, para las 13 y las 18.30 horas.
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