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| José Fernández García, «Pepe el sevillano», con el salmón que sacó en el Sella el domingo |
El Sella fue ayer el más prolífico de los ríos asturianos, pues en sus aguas se registraron cuatro de los diez salmones que se contabilizaron; los otros seis se repartieron así: tres en el Narcea, dos en el Cares y uno en el Eo.
Pescaron en el Sella Rogelio Diego del Corro, de Cangas de Onís, un salmón de 5,200 kilos en zona media a cucharilla; Joaquín Rivero Díaz, de Cangas de Onís, un salmón de 5 kilos a cebo natural en la zona media; Enrique Martínez Arboleya, de Oviedo, un salmón de 4,300, a cebo natural en la zona media; y Carlos Blanco Sordo, de Ribadesella, un salmón de 5,100 a cebo natural también en la zona media.
En el Narcea pescaron José Luis López Pérez, de Pravia, un salmón de 4,600, a cucharilla en zona libre; Aitor Bermejo Velázquez, de Oviedo, una pieza de 5,650 en zona libre a cebo natural, y José Manuel Argüelles Rodríguez, de Gijón, un salmón de 7 kilos, en el coto La Llonga, a cucharilla.
En el Cares pescaron Juan Valdés Tejeiro, de Ortigueru, en el coto La Encina, un salmón de 5 kilos, a cebo natural, Angel Mellizo Bellón, de Madrid, un salmón de 5,900 en el coto El Arenal.
El salmón del Eo lo sacó José María Moirón López, de Santirso de Abres, un salmón de 4,300 en la zona libre de Xesteira, a cucharilla.
La ocupación en general fue buena en todos los cauces aunque alguno de ellos no ofrecía las mejores condiciones para la pesca, como el Narcea por abundancia de agua al haber soltado agua en la presa de Calabazos debido al incremento del nivel de agua después de las lluvias de los últimos días.
El número de capturas diario se ha estabilizado sin embargo entre la media doce y la decena como media y ello lleva a que a estas alturas de temporada se contabilicen prácticamente 150 salmones.
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