Javier Garat |
Los empresarios pesqueros españoles que crearon compañías mixtas en la Argentina manifestaron su preocupación por el conflicto diplomático y económico entre ambos países, tras la decisión del Gobierno sudamericano de expropiar la petrolera YPF, filial de la compañía española Repsol.
Los ejecutivos españoles -principalmente de Galicia- ven como una amenaza para sus negocios que la Unión Europea (UE) resuelva anular las ventajas arancelarias de los productos argentinos que estas firmas exportan al mercado comunitario.
El año pasado, la Argentina envió a la UE productos pesqueros por alrededor de 1.500 millones de euros. El 60% de ese total -más de 800 millones- provino de ventas realizadas por grupos españoles que operan en el país sudamericano, entre los que se destacan Pescanova, Vieirasa, Iberconsa y Armadora Pereira, entre otros.
En la actualidad, en los puertos patagónicos operan más de un centenar de buques factoría que son propiedad de compañías españolas. Estas firmas emplean a unos 250 españoles y a un número superior de tripulantes argentinos.
Al ser consultado al respecto, el secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat, admitió que las empresas de España que operan en la Argentina están preocupadas por lo que pueda suceder en los próximos meses.
“El sistema de ventajas arancelarias para los productos pesqueros argentinos que está actualmente en vigor se termina en el año 2014, pero si llega a adelantarse la salida esto resultaría perjudicial para las empresas que están allí”, indicó Garat.
Y agregó: “Como ejemplo podemos poner el caso del langostino, que ahora paga un arancel del 4,2% y podría pasar a pagar un 12%. Sin duda que todas las empresas que operan allí se verían afectadas”.
Por su parte, el presidente del Cluster de Empresas Pesqueras en Países Terceros (CEPPT), José Ramón Fontán, afirmó que el sector tiene que actuar “con mucha discreción y tacto” para no ocasionar medidas que perjudiquen los intereses de las firmas españolas que trabajan en Argentina.
En tanto, el adjunto a la dirección de la Cooperativa de Armadores de Pesca del Puerto de Vigo (ARVI), José Antonio Suárez Llanos, comentó que desde la entidad esperan que “las aguas vuelvan a su cauce” y las compañías gallegas que operan en Argentina no terminen perjudicándose.
"Es un tema político que debe resolverse tanto en lo que se refiere a Argentina como en lo que afecta a la UE", sostuvo Suárez Llanos.
Por otro lado, Ciro D´Antonio, secretario de la Cámara de Frigoríficos Exportadores de la Pesca (Cafrexport) de la Argentina, dijo que los clientes españoles "están convencidos de que van a existir sanciones". "Llaman todos los días tratando de ver qué es lo que nosotros sabemos".
"Se esperan algunas medidas arancelarias o paraarancelarias. Me parece que todo esto va a ser fruto de qué tan buena o mala sea la negociación por YPF", opinó.
Con respecto a la postura de los exportadores argentinos, D´Antonio manifestó: “Hay preocupación porque España es para la pesca argentina el principal importador. Ocupa el primer lugar en las importaciones pesqueras del país, así que sin ninguna duda especies tan importantes como el calamar y el langostino tienen a España como un actor importante en los negocios. Además, España no sólo es un gran consumidor, es un mercado que deriva a muchos países de Europa”.
Los inconvenientes que pueden tener los exportadores de Mar del Plata, provincia de Buenos Aires, al querer enviar sus productos a Europa son estrictamente formales, relacionados con “derechos de importación, con tasas, impuestos y gravámenes que haga más onerosa la importación de productos de Argentina que de otros países”, precisó.
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