Galicia estrena el Plan de Contingencias por Contaminación Marina

Voluntarios con seguro para limpiar fuel

Desde cómo deben colocarse las embarcaciones de bajura cuando ayuden en una marea negra, coordinadas por cofradías y Consellería do Mar, hasta mapas con las zonas de más riesgo del litoral, un inventario de medios y orografía de la costa y un listado de derechos y deberes de los voluntarios que acudan por tierra. Todo aquello que surgió espontáneamente en la catástrofe del Prestige, de mareas humanas con trajes blancos limpiando las rocas y marineros recogiendo fuel con sus propias manos y trueiros, aparece ahora descrito y teorizado, a modo de catálogo para actuar ante una catástrofe ecológica semejante, en el nuevo Plan de Contingencias por Contaminación Marina de Galicia.

El Camgal, publicado ayer en el DOG justo cuando se ultiman los detalles para el macrojuicio de la mayor catástrofe en la costa gallega, ocurrida en noviembre de 2002, tendrá vigencia por cuatro años y aglutina en un tratado diseñado por el Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino los avances del plan de contingencias de 2004 y el plan territorial de 2006. La improvisación de la ayuda y colaboración por mar, tierra y aire en la marea negra del Prestige sirvió de trabajo de campo de modo que si ocurre otra catástrofe nada se escape a la organización. En cuanto al personal que se una a la limpieza, como los voluntarios de distintos países que hace una década se plantaron en el litoral de la comunidad, deberán "estar asegurados mediante póliza que cubra los riesgos de accidente de la propia persona voluntaria".

En la lista de derechos consta que han de identificarse a través de una credencial, ser "informados y formados" en prevención de riesgos laborales y "reembolsados o compensados" por los gastos durante las labores de limpieza. También hay un código para los trabajadores del mar que, voluntariamente, contribuyan a limpiar las manchas más difíciles para las embarcaciones oficiales de mayor eslora. El plan marca categorías; profesionales de la pesca, marisqueo, submarinismo o acuicultura. "La experiencia demostró que en Galicia las embarcaciones del censo de artes menores y las de acuicultura son las más adecuadas para operaciones de lucha contra accidentes", reconoce el Camgal. El plan puesto en marcha por la Consellería do Mar implica en la alerta y organización en caso de emergencia a siete consellerías, ministerios de Fomento y Medio Ambiente, Delegación del Gobierno, Cuerpos de Seguridad, ayuntamientos, protección civil, bomberos, cofradías, Cetmar y centros de investigación de las tres universidades. En coordinación con el Plan de Contingencias Nacional, los concellos costeros tienen dos años para elaborar planes locales.

Llevaban una década aparcadas en el puerto de Vilagarcía y, ayer, el buque de Salvamento Don Inda las subió a bordo para su traslado hasta Ferrol. Son tres lanzaderas que se utilizaron en su momento para sacar fuel del Prestige. En principio estaban ubicadas en la explanada del muelle comercial pero hubo que quitarlas por las obras de la primera fase de prolongación del ramal ferroviario.

Otra de las novedades del plan Camgal es un mapa de riesgos en función del tipo de vertido. Si éste tiene lugar en el mar, "A Costa da Morte aparece como la más afectada", según consta en el propio plan, mientras que si el derrame se produce desde tierra o muy próximo a la costa, "aquellas zonas más industrializadas son las que presentan un mayor peligro". A la hora de plantear una actuación, el nuevo plan de contingencias divide la costa gallega en cinco zonas o ámbitos de actuación. La zona 1 se correspondería con las rías de Ribadeo, Foz, Viveiro, Barqueiro y Ortigueira; la dos, desde Cedeira hasta A Coruña; la tres serían las rías de Corme-Laxe, Camariñas, Corcubión y Muros-Noia; la cuatro la ría de Arousa y la cinco las rías de Pontevedra y Vigo. En la lista de medios, la mayoría de embarcaciones, medios aéreos y terrestres (barreras, skimmers, contenedores o tanques flotantes) ya constaban en anteriores planes de emergencia. Suman 25 embarcaciones: desde el remolcador Sebastián Ocampo, hasta el buque de salvamento Irmáns García Nodal o los multipropósito Valentín Paz Andrade y Gaviota; además de 11 patrulleras o 7 planeadoras. Por aire, el Pesca I (base en Vigo) y el Pesca II (base en Celeiro).