2.000 kilos de pulpo y 3.000 de sardina, en tierra

Este pulpo de cinco kilos se subastó ayer en la lonja de Tragove (Cambados)

El pulpo volvió ayer a las lonjas arousanas después de varias semanas. La apertura de la veda dejó en la rula de O Grove 1.322 kilogramos de cefalópodo y otros 800 kilos en Cambados, únicas plazas en las que se subastó este producto. En ambos casos los precios fueron similares. El más caro se cotizó a 8 euros el kilo en O Grove y el más barato, a 5 euros en Cambados. El patrón mayor de Cambados y presidente de la Federación Galega de Confrarías, Benito González, lamentaba ayer que esta especie no alcanzara cotizaciones más altas. «O prezo é un pouco baixo, eu contaba con que chegara aos 9 euros», indicó.

Y es que, según González, después de dos meses de veda y con la escasez que hay del producto llegado de otros mares «hai fame de pulpo», aunque en el primer día de campaña el consumidor no respondió a las expectativas del sector. «O primeiro día tampouco é o mellor para valorar este tema porque o mariñeiro aínda anda con medo á hora de traer o recurso para terra. Os vindeiros días verase mellor», añadió.

Ayer también abrió la veda de la nécora, pero las nasas parece que estaban vacías. «Ano de moito de pulpo, ano de pouca nécora», dice la sabiduría popular. Al puerto de O Grove llegó «moi pouca» -en la lonja no supieron precisar la cantidad exacta- y en Tragove no se subastó ni una unidad. El sector espera que hoy cambie esta tendencia y el preciado crustáceo empieza a llegar a las lonjas, no solo a las de Cambados y O Grove, sino también a las de Vilanova y A Illa, que subastan este producto uno y dos días a la semana, respectivamente.

Otras especies que desde ayer se pueden encontrar en las lonjas al abrirse la veda en varias artes son lumbrigante, langosta, pateiro, conguitos, luras y calamar.

Por otro lado, tres barcos de cerco de Laxe tuvieron esta noche una buena jornada de pesca. El Nova Gabeira, el Virgen de Carmen y el San Jose descargaron mas de 3000 kilos de sardina de buena calidad. Estas embarcaciones llevaban unas dos semanas sin capturas de esta especie pelágica. Entre los tres vendieron entre 200 y 300 cajas de pescado, que se pago a unos 33 euros cada uno.

Los pescadores estaban satisfechos con los resultados de la jornada, pues entre los tres ingresaron mas de 6.000 euros. La sardina se pago a 2 euros el kilo.