«Canalón», con el salmón cuya captura dedicó a su padre |
Más de 600 salmones, en concreto 612, han dado hasta ayer los ríos salmoneros asturianos. En el Sella, antes de ayer, los once salmones salieron a cebo natural. Pablo Cueto Martínez, de Arriondas, cogió uno de 4,5 kilos en el coto El Brezol; Gabriel Bernar, de Bilbao, 5 kilos en Rozaones; Jesús García, de Felechosa, 5 en Escrita; Alberto José Pena, de Arriondas, 5,1 en El Brezo; María Luisa Cueto, de San Juan de Parres, 5,5 en La Barca; Daniel Jove, de Villaviciosa, 5 kilos en Sierra; Marcos de Miguel González, de Villaviciosa, 3,300 en Sierra; Jaime Tomás Quesada, de Arriondas, 5,5 en El Aliso; José Rodríguez, de Arriondas, de 4,2 en El Barco; Javier Ruiz, de Cantabria, 5,1 en Los Espigones, y un deportista sacó otro en Tempranas.
Ocho salieron del Cares, a cargo de José Manuel Llaneza, 5,4 kilos en El Tilo; María Rosario Vázquez, 3,8 en El Tilo; Florentino Cuétara, 4,4 en El Tilo; Juan Perales, 6,7 en Monejo; Manuel Terán, 6 en Monejo; David Moradiellos, 4,7 en Niserias; Nordín Salma, 4 en Niserias, y un pescador, 4,9 en La Concha. Uno salió en el Eo, por Alfonso García González, de 5,8 kilos en el Louredal a cebo natural.
Y Rogelio González Pulido, de Llaranes, sacó a a cebo natural en Piedra Blanca (Esva) otro de 2,250 kilos. En el Narcea, salieron ocho: Rafael Marcos Cividanes, 3,300 kilos en Puente Láneo; José Ramón García, 5,5 en Puente Láneo; Adolfo Menéndez, 5,2 en Carbajal; un deportista, 6,3 en El Texu; Martín Urdanoz, 6,5 en el Texu; Valentina Menéndez, 5,140 en El Visu; Ángel José Suárez, 3,815 en Juan Castaño (todos los anteriores a cebo natural); y un deportista de Bárcena, 5,490, a mosca en Juan Castaño.
Por su parte, un ribereño que pescó un salmón, se lo dedicó a su padre fallecido recientemente. «Quiero dedicarlo a la memoria de mi padre», aseveró Ángel Fernández Soto, conocido popularmente como «Canalón», ribereño de Cangas de Onís, minutos después de echar a tierra un salmón en el lance libre de Rozaones, en el Sella. Canalón perdió a su progenitor, Armando Fernández, «el de la Ercoa», el pasado miércoles, a los 81 años de edad, y fue enterrado el jueves en el cementerio parroquial cangués. Tanto «Canalón» como su padre estaban muy unidos en la práctica del arte de la pesca fluvial en aguas continentales asturianas.
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