Los reiterados episodios de toxina en la navaja han hecho que los navalleiros de Bueu no puedan salir a trabajar. La buena noticia de ayer, fue que la zona IV de la ría de Pontevedra dio negativo y una veintena de mariscadores pudo subastar su producto en la lonja. El primer lote de navaja se vendió a más de 20 euros en la lonja de Bueu y el último quedó en casi 13 euros.
Los navalleiros de Bueu pudieron salir ayer a faenar tras producirse la apertura de la Zona IV de la ría de Pontevedra. El Instituto Tecnolóxio do Mar (Intecmar) publicó anteayer los resultados del muestreo de la navaja enviados la semana pasada por los mariscadores ydio negativo en toxina.
Gracias a esta buena noticia, más de una veintena de buceadores salieron a la recogida de la navaja en dicha área, consiguiendo recaudar para la subasta algo más de 75 quilogramos de producto. Según comenta Gerardo González, uno de los navalleiros, esta apertura es buena ya que hoy han podido salir a faenar y vender el producto en la lonja, pero comenta que "o que se venda hoxe aquí hai que analizalo na depuradora e como dea negativo, teremos que devolver o produto ao mar e os cartos aos compradores".
Los mariscadores consiguieron alcanzar ayer la cuota máxima marcada de 15 kilogramos cada uno y califican la subasta de ayer de "buena" ya que el primer lote salió con un precio de 20,35 euros el kilogramo, frente al último lote que fue adquirido por 12,75 euros el kilo. "Normalmente a navalla soe estar a seis ou sete euros", asegura un comprador.
Varios de los presentes en la subasta de ayer comentaron que están de acuerdo en que se cierren los polígonos pero que no están de acuerdo con lo que sucedió el pasado 14 de agosto "que se pechou cautelarmente cando xa tiñamos todo o produto vendido", recalca David García, otro de los mariscadores. Aunque varias fuentes aseguran que los análisis realizados por las depuradoras de lo recaudado el día de ese cierre cautelar dieron negativo en toxina.
El patrón mayor de la Cofradía de pescadores de Bueu, José Manuel Rosas, reiteró ayer que, por el momento, la almeja está cerrada hasta que reciban los resultados de la zona III enviados el jueves. El patrón aseguró que "de non ser por estes episodios de toxinas, a temporada iría ben" y es que en las últimas subastas de navaja, el producto se estaba vendiendo a 10 y 12 euros el kilogramo.
Tras la faena de ayer, se mandó una nueva muestra de la zona IV al Intecmar para analizar y esperan obtener hoy mismo los resultados del análisis. El Intecmar sí que cerró ayer la Zona II de la ría de Pontevedra, en Aldán, para la navaja y longueirón.
Fuente: Faro de Vigo
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