El Gaiás coloca su última piedra

Suponía romper con el PP de Fraga, pero tampoco le quedaba otra.

Sostiene Feijoo que, «consciente da situación na que estamos», al Gaiás decidió darle carpetazo no ahora, sino hace ya tiempo, un buen día de verano, hacia finales de junio pasado. Y que anteayer, cuando ordenó a los suyos en el Parlamento apoyar una iniciativa del BNG que reclamaba precisamente eso, cerrar para siempre el agujero negro del monte compostelano, simplemente se limitó a subir al tren correcto para llegar justo adonde quería; en sus palabras, a «aproveitar unha boa oportunidade, unha proposta de consenso, coa inmensa maioría da Cámara, sen ningún voto en contra». ¿Resultado de esa estrategia? «Galicia vai aforrar moitísimo diñeiro que necesitamos. [...] Estou convencido de que se preguntamos aos galegos sobre isto, estarán de acordo co Goberno».

La mayoría de esas cosas las dijo ayer el presidente de la Xunta en rueda de prensa y el resto las deslizó. Tras la reunión ordinaria semanal de su Ejecutivo, el mandatario popular anunció también el «inmediato» inicio de negociaciones con Acciona Infraestructuras (antigua Necso), Copasa y OHL para rescindir los contratos de julio del 2005 a través de los cuales se les encomendó levantar dos de los seis edificios que iban a componer una Ciudad de la Cultura que finalmente constará de los cuatro ya inaugurados. Se trata de echar atrás la construcción, actualmente paralizada y en estado embrionario, del Centro de Arte Internacional (29.677.866 euros) y del Centro da Música e das Artes Escénicas (82.507.301).

En total, gastos de mantenimiento y programación al margen, las arcas autonómicas se librarán con esta medida de afrontar un desembolso de aproximadamente 175 millones, seis veces más de lo que cuesta sostener anualmente los comedores escolares en la comunidad. Se computan en esa factura no solo lo comprometido en obras con las citadas empresas, sino también inversiones en trabajos de urbanización, dotación interior y equipamiento. ¿Y cuánto deberá poner el Gobierno sobre la mesa para indemnizar a las tres compañías? «Cuantías mínimas en relación» con la anterior, defendió un Feijoo que, no obstante, eludió precisar cifras.

No las concreta de momento, alegó, porque «os intereses xerais» invitan a lo contrario. Porque no es bueno, precisó, emprender conversaciones de este tipo con cartas boca arriba. «Supoño que esas empresas -abundó- se darán conta de que nin para Santiago nin para Galicia un novo edificio da arte e outro da música son prioritarios. E estou, polo tanto, persuadido de que [los perjudicados] serán intelixentes». Contado de otro modo, aspira el líder del PPdeG a que las adjudicatarias se avengan a renunciar, al menos parcialmente, a sus derechos de resarcimiento. Estos últimos, según la fuente con que se hable del asunto, podrían situarse entre 4,5 y 18 millones.

Con quien también habrá de sentarse a charlar Feijoo próximamente es con el regidor de Santiago, el conservador Ángel Currás, quien ocupaba la gerencia de la Fundación Cidade da Cultura cuando esta hace casi ocho años contrató, hallándose en funciones el Ejecutivo, los contenedores ahora suspendidos. «O alcalde quere construílos, o entendo perfectamente», admitió. Pero prima lo general sobre lo particular, adujo.