jueves, 26 de mayo de 2016

Sale una trucha de 1,700 kgs en un pequeño río




El Curantes es un río modesto, afluente del Liñares, pero ayer quiso agasajar a uno de sus incondicionales, el pescador estradense José Manuel Ríos Sueiro, con una trucha de tamaño XL. Sus 53 centímetros de longitud y 1,700 kilos de peso obligaron al deportista a tirar de sus 30 años de experiencia para cansarla para capturarla, como hacen los pescadores de salmón en el Ulla.


Fuente: Faro de Vigo

Cerrada la temporada de salmón en el Río Mandeo con la pesca del último ejemplar autorizado


El día 24 de mayo de 2016 se pescó el cuarto salmón de la temporada en el Río Mandeo.  Fue capturado por el miembro de la Sociedad de Pescadores Río Mandeo , Jorge Castro Estrada.

Utilizó un rapala y lo pescó en el pozo Bocelo. Sus dimensiones,  3.500 kgrs. de peso y 70 cm. de longitud.






El quinto y último, con lo cual se cierra la temporada de salmón en este río, fue pescado ayer por Francisco Javier López Rivas. Sus dimensiones 4.000 kgs. de peso y 72 cm. de longitud.







Nos emplazamos a la siguiente temporada y ahora a disfrutar con la pesca del reo.




Fuente: Sociedad de Pescadores Río Mandeo

sábado, 21 de mayo de 2016

Capturado el tercer salmón de la temporada 2016 en el Río Mandeo







Tercer salmón capturado en esta temporada 2016 en el río Mandeo.
Fue pescado por un miembro de la Sociedad de pescadores Río Mandeo,  en el Pozo del Felpete, arrojando un peso de 5,200 kgs. y con una longitud de 78 cm.
Cebo empleado: rapala.



Fuente: Sociedad de pescadores Río Mandeo

viernes, 20 de mayo de 2016

Sale el segundo salmón de la temporada en el Río Mandeo






En el día de hoy,  día 20 de mayo de 2016, se ha pescado el segundo salmón del cupo de 5 de la temporada 2016, que tiene asignado el Río Mandeo.

El afortunado pescador fue Alfredo Maceiras (padre),  veterano pescador y socio de la Sociedad de Pescadores Río Mandeo. Fue pescado a cucharilla en la piscina de Chelo y ofreció un peso de 4,500kg y una longitud de 75cm.


Fuente: Sociedad de Pescadores Río Mandeo

Repoblación internacional con 3600 esguines de salmón atlántico en el Río Miño





En este río la Xunta de Galicia lleva 20 años trabajando en la mejora de las poblaciones de este emblemático pez mediante actuaciones que se centran en la mejora de la accesibilidad, el control de la pesca y la mejora de las poblaciones mediante repoblaciones con reproductores de origen autóctono. En el año 2011 se ha puesto en marcha una nueva estación de captura en la presa de Frieira, primera barrera infranqueable del curso principal del curso principal del río Miño, como resultado de la colaboración entre la Consellería de Medio Ambiente y la empresa concesionaria de ese arpovechamiento hidroeléctrica, Gas Natural-Unión Fenosa. Desde esa fecha se capturan juveniles de anguila y reproductores de salmón, algunos de los cuales son trasladados a la piscifactoría de Carballedo para su reproducción artificial y la cría de su progenie. Por ello desde 2014 se hacen sueltas de juveniles de salmón atlántico en el TIRM (Tramo Internacional del Río Miño) en colaboración con las Comandancia Naval de Tuy, y la Capitanía de Puerto de Caminha, responsables de la regulación de la pesca en este tramo fluvial. Las acciones de sueltas de juveniles procedentes de reproductores del río Tea se han venido realizando en este río y otros afluentes españoles, sin embargo la obtención de reproductores en Frieira permite mejorar la estrategia de repoblación mediante el incremento del área de cría en afluentes portugueses del Baixo Miño.


En el marco de la Comisión Mixta de Pesca del TIRM, en la cual junto a las autoridades navales de los 2 países también participan representantes de la Xunta de Galicia y de la administración portuguesa, se pretende dar un impulso a estas acciones de mejora de las poblaciones, tanto de salmón atlántico como de anguila europea, mediante la colaboración entre los organismos competentes de Portugal (Instituto de Conservaçao da Natureza e das Florestas, ICNF), Galicia (Dirección Xeral de Conservación da Natureza, DXCN) y los Ministerios de Defensa de ambos países. 

En este escenario se encuadra la repoblación que de 3.600 esguines (juveniles preparados para la migración al mar) que el miércoles 18 de mayo se realizó desde el embarcadero de la Comandancia Naval, en Tui y en la que participaron embarcaciones tanto de la Armada Española como de la Policía Marítima Portuguesa.





Fuente:  Infominho.com

jueves, 19 de mayo de 2016

Presentación en A Pontenova de la Plataforma del Eo





Congreso, desde hoy hasta el domingo. Hoy comienza en A Pontenova el encuentro de prensa deportiva de pesca. Durante esta jornada habrá pesca de trucha en el tramo sin muerte del Eo en A Pontenova; a las 21.00 horas será el acto de bienvenida y a las 21.30 horas se presentará la Plataforma del Eo. A continuación se cursará una visita al Museo de la Pesca.

Mañana jueves se celebrará una jornada de pesca de salmón sin muerte en los cotos del Eo en A Pontenova (en los lotes salmoneros 1, 2, 3 y 4 y en el 1 y 2 de Salmeán). A la 21.00 horas, Agustí Albiol, jefe de prensa de la FEPC, pronunciará la conferencia titulada «El catálogo de especies invasoras», y seguidamente Pablo Caballero, de la Xunta, hablará sobre «La problemática del salmón en Galicia». El viernes seguirán los actos, con una jornada dedicada a la pesca en ríos de alta montaña (pesca de trucha en el coto de Ribeira de Piquín, Eo y Rodil) y un taller de moscas. El sábado se centrará en la pesca del reo y trucha en los cotos de Xinzo y Villarmide.


Fuente: La Voz de Galicia

Científicos del CSIC facilitan el cultivo del pulpo al dar con la dieta de sus larvas





El pulpo es un recurso de primer orden para la flota de bajura gallega. La que se desarrolla en Galicia sobre esta especie es la pesquería artesanal más importante de Europa. Y, sin embargo, este cefalópodo continúa siendo un gran desconocido. De eso se lamenta siempre José Manuel Rosas, patrón mayor de Bueu, puerto en el que el pulpo tiene nombre propio y peso específico. Por eso el trabajo del grupo Ecobiomar (departamento de Ecología y Biodiversidad Marina) del Instituto de Investigacións Mariñas de Vigo (IIM), dependiente del CSIC, con importantes descubrimientos sobre la distribución, dieta, edad y el crecimiento de las larvas, es tan importante. Viene a cubrir alguna de las muchas lagunas que presenta la especie estrella de la bajura.

Esos hallazgos, publicados en revistas de impacto como Fisheries Oceanography o Progress in Oceanography, son el colofón del proyecto Lareco, liderado por el grupo de investigación vigués y en el que también han participado el equipo de Oceanología del mismo IIM y de las universidades de Aberdeen (Reino Unido) y Lisboa (Portugal). Este trabajo se ha desarrollado durante los últimos cuatro años, pero ha reunido toda la experiencia de Ecobiomar, un grupo que lleva 20 años investigando sobre las larvas plantónicas de cefalópodos en las rías gallegas.

Todo el trabajo les ha permitido concluir que hay factores climáticos y oceanográficos que influyen en la mayor o menor abundancia de pulpo. Si bien esto era cuando menos sospechado, sí ha constituido toda una novedad descubrir que las larvas de pulpo no se distribuyen aleatoriamente por las aguas, sino que «habitan en áreas que aumentan su supervivencia porque allí encuentran las condiciones externas y las presas adecuadas para su crecimiento óptimo», explica Ángel González, investigador principal de Lareco y jefe del grupo Ecobiomar. Así han dado con «una especie de guardería en las islas Cíes», donde durante buena parte del verano y en otoño se concentran las crías de la especie. También han apreciado que las larvas, cuando nacen, no van al fondo, sino que permanecen en la columna de agua durante varios meses, donde se van alimentando. Y ahí está otro de los grandes avances de este estudio: que por primera vez se ha identificado qué come el pulpo cuando no es más que una larva de dos milímetros. ¿Cuál es su dieta? Varias familias de crustáceos, como cigala, langosta, gambas, cangrejos, camarones, algún que otro pez y organismos planctónicos. Eso, hasta ahora, no se sabía porque las larvas apenas miden dos milímetros y «no mastican, sino que chupan» el alimento, aclara González, con lo que recurrir a técnicas como el análisis de ADN de lo que se encontraba en el estómago de esas minicrías ha sido fundamental para descubrir esa dieta temprana.

Ni que decir tiene que este descubrimiento es un importante avance que puede ser clave para desarrollar el cultivo integral de la especie. Hasta ahora, el principal cuello de botella para producir pulpo de acuicultura era la alta mortandad de las larvas debido precisamente a que no se sabía qué alimento era el apropiado para su supervivencia. Un desconocimiento «a escala mundial» destaca Ángel González.

Quince años de campañas de estudio del pulpo dan para mucho. Y aunque no era materia del proyecto Laredo, el jefe del grupo de investigación Ecobiomar abre las puertas a un nuevo estudio después de que en esos tres lustros de observación comprobase que dentro de las rías solo se encuentran larvas recién eclosionadas con tres ventosas. Sin embargo, en las campañas que se hacen fuera de la plataforma y a mayor profundidad, se han encontrado crías de más de tres ventosas, «hasta seis y siete». Eso significa que se reúnen en esa guardería en sus primeras etapas, para después desplazarse a aguas exteriores y, finalmente, retornan a zonas costeras ya como adultos.

En eso, en determinar en qué punto del desarrollo se encuentra un ejemplar concreto, también ha habido avances. La edad del pulpo se estima de una manera parecida a la de los árboles. González y su equipo ha abordado, por primera vez, la técnica analizar los anillos de crecimiento que presenta el estilete -una pequeña estructura cartilaginosa alojada en la cabeza- en los primeros estadíos del ciclo vital del pulpo. Claro que en adultos es más fácil estimar la edad que en larvas de dos milímetros, a cuyo estilete hay que practicar un corte histiológico y contar los anillos para calcular cuánto tiempo hace que ha eclosionado.

Según González, que se ha embarcado ahora en una investigación sobre el calamar, todos estos hallazgos serán claves tanto para el cultivo del pulpo como para determinar medidas de explotación de la pesquería.


Fuente: La Voz de Galicia

domingo, 15 de mayo de 2016

Lo quieres saber todo de peces: FishBase







FishBase (Base de datos de peces) es una base de datos con información sobre peces. En octubre del 2006 incluía la descripción de más de 29.400 especies, 222.300 nombres vulgares en cientos de idiomas, 42.600 fotografías, y referencias a 38.600 trabajos en la literatura científica.
En 1987, Daniel Pauly, inspirado por las Hojas de Identificación de Especies (Species Identification Sheets) y otros productos de Walter Fischer producidos para la FAO en la década de 1970, propuso crear una base de datos estandarizada para especies de peces, como parte del "ICLARM Software Project". El año siguiente, Daniel comenzó a trabajar junto con Rainer Froese, quien había estado trabajando en un sistema experto para identificar larvas de peces. Luego de un intento frustrado de construir un sistema utilizando Prolog, Froese cambió a DataEase, una base de datos relacional para DOS. Para 1989 el proyecto recibió su primer apoyo institucional económico.
En 1993 el proyecto cambió a Microsoft Access, y en 1995 se produjo el primer CD-ROM llamado "FishBase 100". Los comentarios en las revistas científicas si bien alabaron el alcance y la idea, destacaron que había numerosos huecos en la información provista. Las ediciones de CD posteriores se han venido editando con una frecuencia anual, la versión de FishBase 2004 por su volumen requería de cinco CD, o un DVD. Para poder visualizarse el sistema requiere Windows 98 o posterior, y no está disponibles en otras plataformas como Mac OS X o Linux.
FishBase estuvo disponible por primera vez en la Web en agosto de 1996, al año siguiente se contrató un webmaster. Al tiempo, toda la información de la base de datos estuvo disponible para consulta a través de la red.
A partir del año 2000, FishBase ha sido administrada por el FishBase Consortium. El consorcio está formado por:
  • Africamuseum, Tervure
  • Universidad Aristóteles de Tesalónica, Tesalónica
  • Fisheries Centre University of British Columbia, Vancouver
  • Food and Agriculture Organization de las Naciones Unidas, Roma
  • IFM-GEOMAR, Kiel
  • Museo Nacional de Historia Natural, París
  • Museo Sueco de Historia Natural, Estocolmo
  • WorldFish Center, Penang

En la medida que los especialistas en peces se han enterado de la existencia de FishBase, más de 1370 colaboradores han enviado contribuciones. Para mantener su valor como una base de datos de carácter científica, no se permite el agregado de información original en FishBase; todo su contenido debe estar basado en material que ha sido publicado con anterioridad.






A Rainer Froese le gustaban los peces desde niño. Tuvo su primer acuario a los 10 años y ahora tiene muchos miles de peces en la mayor base de datos del mundo para una familia de organismos, Fishbase, que creó, junto con su colega Daniel Pauly, hace 18 años. "Actualmente tenemos 29.000 especies en el sistema, y debe de haber unas 35.000 todo el mundo", comenta, "así que nos faltan unas 6.000". La base de datos está en Internet (www.fishbase.org) a disposición de cualquiera que quiera consultar algo y su información cimenta investigaciones científicas, políticas pesqueras, estrategias de defensa del medio ambiente y conservación, a la vez que alimenta la curiosidad sobre la vida marina. Con una corbata que hace honor a su pasión y a su trabajo, con dibujos de peces de colores, Froese, científico del Instituto Leibniz de Ciencias del Mar (en Kiel, Alemania), presentó las perspectivas de Fishbase en la conferencia Comunicar la Investigación Científica CER 2005, organizada por la Comisión Europea en Bruselas.
¿Qué es Fishbase?
Es el mayor sistema de información sobre peces, con todo lo que usted quisiera saber sobre los peces y que nunca se atreve a preguntar. Es de libre acceso por Internet. Usted pone el nombre común de un pez, en su propio idioma (usamos más de 100 lenguas y tenemos más de 200.000 nombres comunes de peces) y obtiene un resumen de información, fotografías, datos sobre especies próximas, el nombre científico, la distribución del pez en el mundo, su biología, su comportamiento, etcétera.
Cuando empezaron no existía la ahora omnipresente web. ¿Cómo lo hicieron?
Empezó Daniel Pauly haciéndolo en tarjetas que guardaba en una caja... iba recogiendo información sobre peces y registraba los datos, pero la cosa iba creciendo mucho y me planteó cómo podrían meterse los datos en ordenador. Pensábamos tener unas 200 especies y unos 500 usuarios en todo el mundo. La Comisión Europea nos dio financiación y enseguida ampliamos nuestra perspectiva: aspirábamos a llegar a 2.000 especies e implicamos a más gente en el trabajo. Ahora Fishbase tiene 29.000 especies de todo el mundo, de mar y de agua dulce, y dos millones de personas visitan cada mes nuestra web. La razón del éxito... si presentas la información científica con el formato adecuado, encontrarás muchísimo interés entre el público.
En la idea inicial, ¿quién sería el destinatario de los datos?
Pensamos en los gestores de pesquerías de los países en vías de desarrollo, especialmente en zonas tropicales y subtropicales, donde hay muchas más especies que en otros lugares. En una red de pesca en el mar del Norte puede haber 10 especies diferentes, en el Mediterráneo tal vez unas 50, en las aguas tropicales, unas 200. Así que en los trópicos hace falta mucha más información sobre los peces, su reproducción, sus propiedades, sus medidas, la cantidad de crías, etcétera, si quieres explotar la pesca de forma sostenible.
¿Cuántas especies de peces habrá en el planeta?
Estimamos que unas 35.000, cada año se descubren unas 250 especies nuevas.
¿Dónde cree que quedan más especies por descubrir?
Sobre todo en las grandes profundidades, pero también en sistemas fluviales como el Mekong o el Amazonas.
¿Existen bases de datos así para otros organismos?
No hay nada similar para aves, o para mamíferos o para mariposas. Es sorprendente. Hay algunas bases de datos con nombres de especies y algunas fotos, pero poco más. Nosotros estamos preparando la extensión del concepto de Fishbase para abarcar especies acuáticas en general. Se llamará Aquaspecies.
¿De dónde sacan la información sobre los peces?
Toda la información se rastrea hasta referencias científicas. Puedes poner un nombre de un pez, haces clic en el ordenador y obtienes la referencia a alguna publicación. Fishbase vive de los artículos científicos, es una especie de metabase de datos.
¿Es útil para hacer investigación?
Tenemos especialistas de diferentes áreas (dinámica de poblaciones, genética, morfología, etcétera) que analizan las publicaciones que van saliendo en la literatura científica, extraen la información y la ponen en la base de datos. Esto permite hacer estudios muy variados. Fishbase tiene unas 900 citas al año [en publicaciones científicas], lo que significa un gran éxito.
¿Destacaría algún resultado de investigación?
Por ejemplo, podemos estimar con mucha precisión, para cada especie, el tamaño de madurez a partir de unos cuantos parámetros. También obtenemos otros datos interesantes para la gestión de poblaciones, por ejemplo la flexibilidad de una especie ante determinadas cantidades de captura, la pesca anual idónea, etcétera. Por cierto, me han hablado de la campaña española Pezqueñines no gracias, y me parece estupenda. Uno de los grandes éxitos ha sido combinar la posición de una especie en la cadena trófica con las capturas anuales, y así podemos evaluar la situación de diferentes especies. Esto nos ha mostrado que el nivel trófico medio está cayendo, lo que indica que algo pasa globalmente.
¿No teme que se usen los datos para pescas ilegales?
Más que para pesca ilegal... son peligrosos los entusiastas que desean capturar un pez raro. Puede ser una especie en peligro y la información sobre la localización puede incitar a esa gente a ir a capturar ejemplares.
¿Sirve Fishbase para la conservación?

Se hacen estudios muy interesantes. Sabemos, por ejemplo, que los peces que emigran entre el mar y los ríos, como los esturiones, están seriamente amenazados porque tienen que pasar cuellos de botella como las desembocaduras de los ríos, donde suele haber grandes ciudades. También hemos visto que los peces muy grandes están especialmente amenazados de extinción. Cuanto más grandes peor, como, el siluro del Mekong, de dos metros de largo, del que, aunque no tengamos información concreta sobre su situación y las capturas, podemos inferir que está en peligro por su tamaño.
¿Qué le parece la acuicultura?
Se presenta a menudo como la salvación de la pesca y es un malentendido. Si se trata de bivalvos o de organismos de los niveles inferiores de la cadena trófica está bien, o incluso si se trata de una zona acotada en la que se mantienen peces que se alimentan de lo que hay en ella... El problema es cuando la acuicultura industrial incorpora el alimento de los peces, especialmente si se trata de otros peces, y se mete más de lo que se saca.
¿Es peligroso?
Si se quieren obtener peces apreciados en el mercado y se alimentan con especies locales, a menudo éstas desaparecen. En el caso del atún, en el Mediterráneo, en las costas españolas, se están aplicando prácticas en las que la relación entre lo que se incorpora a la acuicultura y lo que se produce es de 10 a uno, es decir que se meten 10 kilos de alimento por kilo de atún obtenido. Capturan bancos de atunes juveniles, los acotan con mallas y los alimentan con otras especies capturadas con otros pesqueros. Los atunes luego se venden fuera, en el mercado de Tokio, y no hay control alguno, no hay estadísticas sobre las capturas. Es un negocio millonario pero no beneficia en absoluto a las poblaciones locales del Mediterráneo. Se dice que es acuicultura, pero es pesca incontrolada.
¿Qué planes de futuro tienen para Fishbase?
Estamos trabajando en un par de cosas: elaborar mapas electrónicos de la distribución de los peces en el mundo y buscar patrones de las estrategias de vida de las especies.
Fuente: El Pais/Wikipedia

viernes, 13 de mayo de 2016

Álvarez-Cascos pesca un salmón en el río Esva





El secretario general de Foro Asturias y exministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, ha demostrado un año más su pasión por la pesca del salmón. Ayer por la mañana logró sacar del río Esva, en Brieves (Valdés) un ejemplar de 4,5 kilogramos. Álvarez-Cascos es un gran aficionado al deporte de la pesca fluvial con una amplia experiencia: es un asiduo tanto de los cotos del occidente y del oriente de Asturias. Siempre se ha mostrado, además, proclive a potenciar la pesca como motor turístico para las zonas rurales. Francisco Álvarez-Cascos es titular del coto en el que logró la pieza junto a los también pescadores Marcos Parrondo y Beto Balsera.

El salmón capturado por el político gijonés fue uno de los cinco registrados en la jornada del miércoles, pues los ríos asturianos siguen dando ejemplares con cuentagotas. La semana había empezado con siete capturas, pero este día se redujo la contabilización a sólo cinco.
En todo caso el salmón de Alvarez-Cascos supone el tercero del Esva, que había dado sus primeros ejemplares el martes, primer día hábil para pescar esta semana, dieciseis días después del inicio de la temporada. El campanu de este río lo echó a tierra Luis Miguel Rendueles.


Fuente:  La Nueva España

jueves, 12 de mayo de 2016

Sale el campanu del río Lérez



El primer salmón de la temporada en el Lérez pesó 3,6 kilos y lo capturó un veterano pescador de Madrid que desde hace 14 años lanza el sedal en el río pontevedrés. Virgilio Alonso frecuenta los cauces gallegos y asturianos desde hace 25 años y hace solo diez días capturó el segundo salmón de la campaña en Galicia.





Hace solo diez días el asturiano Virgilio Alonso González se desplazaba desde su domicilio de Madrid hasta el río Ulla, donde pescó el segundo salmón de la temporada en Galicia. Ayer batía otra marca en Pontevedra. A las 11.30 horas, en el lugar de Sadornil, Bora, este pescador de 49 años de edad capturaba en el coto de Monte Porreiro el "campanu" del Lérez: un salmón hembra salvaje, que pesó 3,639 kilos y midió 74,5 centímetros. Cayó en su caña atraído por una quisquilla como cebo.
Este pescador deportivo, con 25 años de experiencia con la caña, acude siempre que puede desde su residencia en Madrid a cualquiera de los ríos gallegos y asturianos, para practicar su afición favorita. Lo hace con su mujer y en ocasiones también con sus dos hijas, de 14 y 15 años, todas igualmente aficionadas a la pesca.
El río Lérez, que frecuenta desde hace 14 años, es uno de sus destinos favoritos porque "tiene aguas muy cristalinas", asegura.
La exitosa pesca de ayer se logró después de una cena de marisco en Arcade la noche anterior y un relajante paseo por el centro histórico de Pontevedra, que el pescador y su cónyuge nunca perdonan cada vez que visitan la capital del Lérez.
Y una vez cobrada la preciada pieza, la familia Alonso tenía previsto regresar ayer mismo a Madrid, donde degustarían el salmón del Lérez en compañía de amigos y otros aficionados a la pesca.
No era la primera vez que Virgilio Alonso captura el primer salmón de la temporada. En el año 2008 se hizo con el "campanu" de Galicia, una circunstancia que, como explica, "depende mucho de la suerte", porque todo lo que se refiere al salmón -añade-, "está rodeado de misterio".
Igualmente "misteriosas" son las causas que hacen que unos años se avisten muchos ejemplares y otros sean tan escasos que sea difícil capturar alguno.
"Ahora hay muy poco salmón e incluso los guardas del río no se explican el porqué", indica este veterano pescador, que seguirá acudiendo a lanzar el sedal en el río Lérez. "Es un privilegio venir aquí; no solo por el río, también está la ciudad, las calles, el marisquito, es todo un placer venir a Pontevedra", sostiene.


Fuente: Faro de Vigo



miércoles, 11 de mayo de 2016

El pescador del campanu asturiano 2016: “El dinero, sí, pero la satisfacción...”





El Coto de La Volta, en el Eo, llevaba agua suficiente como para albergar algún salmón. El pescador de Pontedeume, Guillermo Maraño, comenzaba sus primeros lances al alba y notaba la primera picada.

Un salmón pequeño, que no daba la medida, y tenía que ser devuelto al agua. Eran las 7.25 de la mañana. Un par de varadas más, y el campanu asturiano, el primer plateado de la temporada en la vecina comunidad, era capturado por un gallego.
“No peleó mucho, era fresco, con pulgón, y se ve que había llegado a La Volta de un tirón, porque a los cinco minutos estaba en la sacadera”, comenta este pescador que puede poner una muesca en la caña y guardar para siempre la cucharilla con la que puso en tierra al preciado pez.
“Había bastante agua y creíamos que podría haber algún salmón. Fue debajo de la pasarela, al décimo lance, ya sabes como es esto... La fortuna”, explica con una gran dosis de modestia. Pero el caso es que el primer salmón del principado tiene nombre gallego. Pesó 4,1 kilogramos y, rápidamente, se sabía que era el campanu. “Me lo dijo Tomás, el guarda: ‘vámonos para Cornellana que es el primero’ y así fue”, rememora Maraño en su gran día de pesca.
Hace años se llegaron a pagar más de 10.000 euros por el primer salmón de Asturias, el único que se puede vender (ahora hay dos campanus porque también se subasta el del Sella). Este fueron ‘solo’ 3.700 euros, el más barato de la historia.
“Lo del dinero sí, está bien, no lo vamos a negar. Pero la satisfacción no me la quita nadie, ningún pescador, sea o no asturiano. Ya sé que la pesca del salmón es una lotería y se juntan muchos factores, me tocó a mí y esa satisfacción me acompañará toda la vida. Esto es lo más de lo más”, comentaba feliz este eumés que, además, preside la sociedad de pescadores del Eume, un río que, hace setenta años, era frecuentado por aficionados de toda España detrás de sus ya extintos salmones a causa de la presa y la contaminación.



Fuente: El Ideal Gallego

lunes, 9 de mayo de 2016

Reo Galicia 2016: El campano porteño sale el primer día de pesca





Desde hace cinco años en Ponte do Porto otorgan un trofeo al pescador que captura el primer reo de marea de la temporada piscícola que se abrió este domingo primero de mayo. Este vez el campano porteño del río Grande do Porto fue tempranero y salió a mediodía, de la caña de Carlos Vieites González, de Bustelo, en Dumbría, que recoge su segundo trofeo, una cunca de caldo de riola de barro de Buño, entregada por el colectivo ecologista PX que organiza la entrega.

Vieites es miembro de la asociación de pesca deportiva Neria con sede en Vimianzo. El año pasado hubo que esperar a la segunda jornada para tocar la campana de bronce que anuncia el trofeo. Como comenta Carlos Vieites "hai moito reo pero pequeno, que non da a talla, eu collín cinco e tiven que ceibalos, un andaba rozando a talla legal". En Ponte do Porto la campaña empieza un mes después que en el resto de la comarca por la presencia de salmónidos, siendo la estrella el reo de marea. En esta primera jornada salieron truchas de buen tamaño y se avistaron muchos reos pero es hacia el verano cuando el tamaño crece y entran más ejemplares de talla. Otro problema este año según indican pescadores y ecologistas es que debido a las fuertes riadas muchos reos que entraron del mar ya remontaron en semanas pasadas el cauce y se hallan aguas arriba, en la zona de Pasarela e incluso en Baio. La presencia de garzas y cormoranes indica la existencia de estos grupos de peces. Precisamente la subida del mar a Ponte do Porto de la especie marca la mayor cantidad de estas aves en el coto del interior de la ría de Camariñas.






El campano medía 41 centímetros y pesaba 900 gramos. Fue capturado con mosca, ya que la miñoca está prohibida en el coto de Ponte do Porto. Según indican desde el colectivo PX la prohibición de pescar con miñoca viene dada por la gran cantidad de peces muertos que no daban la talla y se encontraban en años pasados en las riberas, ya que los pescadores al retirar el anzuelo y la lombriz causaban la muerte de los ejemplares no válidos. Esta práctica era generalmente usada por varios pescadores castellanos que se acercaban al coto porteño.

Fuente: Adiantegalicia.es

Un pescador de A Estrada vence en el concurso internacional de Río Ulla





Los algo más de 5.700 gramos del salmón que sacó el sábado de las aguas del Ulla en el coto de Ximonde convirtieron ayer al estradense Manuel Órrea Moure en el campeón del XL Concurso Internacional de Pesca de Salmón organizado por la Sociedade Deportiva Río Ulla de A Estrada. Con seis capturas, el certamen se quedó a tres piezas de completar el cupo de nueve ejemplares autorizado.

La segunda y última jornada del concurso deparó tantas capturas como la primera, si bien los tres salmones conseguidos se obtuvieron en un único coto, el de Ximonde. Este enclave del Ulla se proclamó como reino indiscutible para el bautizado como "rey del río". No en vano Ximonde deparó cinco de los seis salmones pescados durante el fin de semana, con la única excepción del que logró sacar del agua en Sinde -el sábado- Manuel Paz, natural de Cuntis y residente en Pontevedra.
El primer salmón de la jornada de ayer fue madrugador. Cinco minutos después de que comenzase la primera de la dos mangas matutinas, Julio Gallego Núñez, un pescador de Cangas, sacó del río un ejemplar de 4.732 gramos. Para lograrlo utilizó cebo natural.
La jornada siguió animada. A media mañana, en torno a las 11.10, y de nuevo en uno de los puestos de Ximonde, llegó la segunda captura dominical. Corrió a cargo de Lino Nogueira Martínez, un pescador de A Estrada. El salmón que se dejó seducir por la cucharilla que este deportista colocó en su caña arrojó un peso de 3.913 gramos.
Ya por la tarde, el río Ulla brindó un regalo al pescador de Santeles Jesús Carbia, popularmente conocido como Louzao. En el mismo día en que cumplía sus 82 primaveras, este amante de la pesca del salmón se hizo con una pieza de 3.979 gramos. Empleó para ello cebo natural. La casualidad quiso que esta no fuese la primera vez que este pescador estradense logra alegrarse el día de sus cumpleaños ganando la pelea al salmón. Hace dos años, coincidiendo también con su aniversario, se hizo con otro ejemplar del apreciado monarca fluvial.
Con unos niveles del río más favorables que durante el arranque de la competición, el segundo día de este concurso internacional estuvo bastante animado. El salmón picó varias veces en distintos momentos de la jornada, aunque solo en tres ocasiones llegó a la sacadeira.
A las 21.00 horas de ayer, los 48 pescadores participantes en el XL Concurso Internacional de Pesca de Salmón tuvieron que abandonar las cañas. Los participantes se dieron cita en A Casa da Fandiña, en la parroquia estradense Cora, para asistir a la entrega de premios de esta última edición.
Además de en el río, el salmón fue también ayer en A Estrada protagonista en el plato. Establecimientos hosteleros de la villa cerraron el primer fin de semana de degustación de tapas a base de salmón. Estas especialidades volverán de saborearse el próximo viernes y continuarán el sábado, justo en la antesala de la celebración de la Festa do Salmón.


Fuente: Faro de Vigo

Salen seis salmones en el concuroso de Salmón del río Ulla





El estradense Manuel Órrea Moure ganó el Concurso de Salmón que organiza la Sociedad Río Ulla de A Estrada que preside Miguel de la Calle. Segundo fue Xaquín Lorenzo Muiños, también estradense y tercero Julio Gallego Núñez, de Cangas.

El concurso recuperó peso al elevarse el número de capturas. Fueron pescados seis salmones tres el sábado y tres el domingo. El pasado año solo cayó uno y hace dos años, 2. Precisamente había ganado Jesús Carbia que ayer fue cuarto el día que cumplía 82 años. Satisfacción en la organización. No hubo incidencias, volvieron los peces a las cañas y participaron 48 pescadores.
El sábado abrió las capturas Xaquín Lorenzo Muíños en Ximonde a las 12.30 horas con una pieza de 4,919 kilos. Manuel Paz, de Cuntis, capturó el segundo del concurso con cucharilla a las cinco, pero en el coto de Sinde. Pesó 3,962 kilos. El vecino de Callobre (A Estrada), Manuel Órrea Moure, pescó en Ximonde un ejemplar de 5,750 kilos a las seis.
Ayer Julio Gallego Núñez, de Cangas, sacó en Ximonde, con cebo, un salmón de 4,732 kilos a las 8.05 de la mañana. Lino Mosquera Martínez, de A Estrada, obtuvo su pieza en Ximonde a las 11.10 horas con cucharillas y pesó 3,913 kilos. Un clásico estradense y ya ganador del concurso en el 2014, Jesús Carbia Pereira capturó su salmón a las cinco de la tarde en el coto de Ximonde y con un peso de 3,979 kilos.


Fuente: La Voz de Galicia

domingo, 8 de mayo de 2016

Pescan en Asturias dos salmones de mas de 10 kilos


Antonio Calleja (derecha) posa ayudado por José Luis Rodrigo con el salmón de 10,150 kilos que pescó ayer en el Sella


Cambió el tiempo, llegó la borrasca, se avivaron las mareas pero esto tampoco dió fruto para mejorar las capturas en una temporada de pesca en los ríos salmoneros asturianos que está llevando a un comienzo de los más flojos de los últimos años. Si el miércoles se cerraba la jornada sin capturas por primera vez, el jueves únicamente se sacaron cinco piezas. Eso sí, dos de ellas superaron los 10 kilos de peso y casi alcanzan el metro de longitud.

El río Narcea solo dió uno, pero mereció la pena. El ovetense Enrique Díaz Barbón sacó el mayor de la jornada: uno de 10,625 kilos y 96 centímetros de longitud, a cucharilla, en la zona libre.

Otro que pesó medio kilo menos, 10,150, y de 95 centímetros de longitud, lo sacó en el Sella Antonio Calleja Palacio, de Triongo (Cangas de Onís), a cucharilla en el coto El Golondrosu.





Fuente: La Nueva España

Floja temporada del salmón en Asturias


José Andrés González, con un salmón de 5,670 kilos capturado en el Sella



No hay forma. Esta temporada los salmones se resisten a picar. Se cumplen hoy dos semanas desde que se levantó la veda en los ríos asturianos y solamente se llevan capturadas 62 piezas. Se esperaba el incremento en el fin de semana, fechas en las que aumenta el número de pescadores, pero ayer solamente se capturaron cinco, como el viernes.

Dos, en el río Narcea, a cargo de Gonzalo Fernández Suárez, de Quirós, de 5,215 kilos, y el otro lo consiguió un pescador de Salinas, de un peso de 8,550 kilos. Ambos fueron sacados a cucharilla en la zona libre media.

El Sella también aportó ayer sábado dos, ambos igualmente en la zona libre y a cucharilla. Los sacaron Edison Filpo Pinena, de Arriondas, de 4,290 kilos, y Melquiades Alvarez Fernández-Peña, de Burgos, de 5,380 kilos.

El otro salmón del sábado salió en la zona alta del Eo, en el coto Salmeán, a cebo natural, a cargo de Ventura Mon Blanch, de Vegadeo, de 8,450 kilos. Se quedaron ayer en blanco los ríos Cares y Esva, en este último aún se está a la espera de su campanu.



Fuente: La Nueva España

La primera jornada del Concurso de Pesca do Salmón del río Ulla se cierra con tres piezas


Las aguas variaron el nivel entre la mañana y la tarde


Con 50 años de tradición a sus espaldas, el Concurso Internacional de Pesca de Salmón que organiza la Sociedade Deportiva Río Ulla arrancó a primera hora de la mañana de ayer en tres de los cotos salmoneros que brinda este río a su paso por A Estrada. Los 48 pescadores participantes se distribuyeron para competir, mediante mangas deportivas, en los puestos de Ximonde, Sinde y Santeles. La primera de las dos jornadas de este certamen se cerró con la captura de tres piezas del afamado "rey del río".

Las primeras horas de la mañana fueron flojas. El alto nivel del río no ayudó a quienes se afanaban por atraer al salmón con diferentes técnicas. Sin embargo, antes que concluyese la segunda de las dos mangas matutinas, el estradense Xaquín Lorenzo Muíños se hizo, a cebo natural, con un ejemplar de 4.919 gramos. Lo sacó en el agua en el coto de Ximonde y no sin batalla. Peleó para llevarse la pieza unos 25 minutos.


El estradense Xaquín Lorenzo, con el primer ejemplar del día


El concurso se animó por la tarde. Las aguas descendieron y los salmones comenzaron a picar, aunque no todos llegaron a la sacadera. Los dos ejemplares vespertinos fueron casi simultáneos. El primero cayó en el coto de Sinde, en torno a las 17.00 horas. Se lo llevó Manuel Paz Castro, de Pontevedra. Sacó con cucharilla un ejemplar de 3.962 gramos, según los datos aportados por la sociedad Río Ulla. La técnica escogida en esta ocasión fue la cucharilla.

Poco después salió el tercero y de nuevo escogió el coto de Ximonde. Lo pescó Manuel Órrea Moure, de A Estrada. Los 5.719 gramos del ejemplar que sacó del Ulla utilizando la cucharilla lo situaron al cierre de la jornada de ayer en la primera posición de este concurso, para cuya puntuación se tienen en cuenta el número de piezas logradas por los participantes y el peso y dimensiones de los ejemplares pescados.


Manuel Paz y Manuel Órrea, con sus piezas


Los tres concursantes que ayer lograron un salmón en el marco de este concurso tienen una dilatada experiencia en la pesca de esta especie. Tras hacerse con uno de estos apreciados peces, los tres tuvieron que retirar sus cañas del concurso, ya que las bases establecen que únicamente pueden pescar un salmón por día.

Río Ulla aguarda que las aguas no incrementen su nivel para la segunda jornada del concurso. El cupo fijado es de nueve salmones, de manera que los deportistas participantes todavía pueden competir hoy para hacerse con seis de estos peces.

La competición fija en cada una de sus jornadas cuatro mangas, dos por la mañana -08.00 a 10.30 y de 10.30 a 13.00- y otras dos por la tarde (de 16.00 a 18.30 y de 18.30 a 21.00). Los 48 pescadores se volverán a rotar por los tres cotos, de manera que en cada turno seis prueben suerte en Sinde, otros tantos lo hagan en Santeles y 12 traten de apresar al salmón en las aguas del de Ximonde.




Fuente: Faro de Vigo

El concurso de pesca de salmón del Ulla cierra su primera jornada con tres capturas


Uno de los participantes capturó un ejemplar que saltó de la sacadeira y regresó al Ulla


La primera jornada del concurso de pesca de salmón de la sociedad deportiva Río Ulla se cerró ayer con un balance de tres capturas. Dos de ellas se produjeron en el coto de Ximonde y una en el de Sinde.

El primer ejemplar se rindió a la caña del estradense Xaquín L. Muíños en el puesto de Penedo Redondo (Ximonde). Hubo que esperar hasta las 12.30 horas. El pescador había probado suerte a primera hora en la zona baja del coto. Escapó de las aglomeraciones en los puestos de mejor fama y se asentó en solitario en una zona que «estaba de libro». «Era un sitio boísimo, estaba moi ben de auga e estaba eu solo. Eu vino feito. Ata puxen a sacadeira ó lado para estar preparado porque estaba convencido de que ía sacar un», explica. Pero el pez no picó. El segundo intento lo hizo en una vaguada en la que le costó entrar por la crecida. Pero el agua lo obligó a quedarse a medio metro de la posición idónea. Abandonó el puesto.

A la tercera fue la vencida. En el puesto de Penedo Redondo pidió permiso para situarse entre dos pescadores. En cuanto pudo tomar posiciones correctamente, lanzó una varada alegre -quedaban 10 minutos para el fin de su turno- y el salmón picó. Fue un ejemplar de casi cinco kilos de peso y 83 centímetros.

Xaquín es montador artesano de moscas, pero ayer capturó su ejemplar con un cebo de quisquilla. «Hoxe o río mandaba pescar a cebo ou a cucharilla», comenta.

Tuvo que luchar 27 minutos con el pez. «Era un salmón moi fresco, moi prateado, recién entrado no río», comenta. Lo venció con una caña de 10 metros y con un sedal del año pasado. Xaquín tiene un punto supersticioso y presentía que le daría suerte repetir con el viejo.

El segundo ejemplar del día cayó en el puesto de O Carballo, en el coto de Sinde, y pesó 4,3 kilos. Lo capturó sobre las 17.00 horas Manolo Paz, un vecino de Cuntis afincado en Pontevedra.

El tercero se lo llevó el estradense Manuel Órrea Moure, vecino de Callobre. Fue el más grande de la jornada (5,750 kilos). Picó sobre las 18.00 horas en el puesto de O Poio do Bote, en Ximonde. A Manuel le había partido la caña por la mañana. Para no perder tiempo comprando otra, por la tarde utilizó una de pescar trucha que le prestó su hermano. Le llevó su tiempo doblegar al salmón, pero con las voces de ánimo de sus amigos lo consiguió.

Durante la jornada de ayer otros dos salmones picaron en Ximonde pero consiguieron liberarse. El concurso de pesca se resolverá hoy con una nueva jornada con 48 deportistas en el río.




Fuente: La Voz de Galicia

Salmón




Los salmones son peces marinos y de agua dulce de la familia de los salmónidos distribuidos por los océanos y mares de casi todo el mundo. Su nombre procede del latín salmo, que es como llamaban en la antigua Roma a estos peces.

Las mayoría de las especies de este género son anádromas: nacen en aguas dulces, migran al océano y vuelven al agua dulce para procrear. Se les atribuye la capacidad de volver al mismo sitio donde nacieron para reproducirse, y los estudios recientes muestran que al menos un 90% de los salmones que remontan una corriente nacieron en ella. No se sabe cómo se orientan, pero puede que su fino sentido del olfato reconozca la química de su río natal. Otras especies, las menos, pasan toda su vida en el río o en un lago.

Son especies muy valoradas en la pesca, tanto en la deportiva como para su comercialización como alimento para consumo humano. Muchas especies son muy usadas en acuicultura.

El salmón es un alimento habitual y razonablemente sano por su alto contenido en proteínas y ácidos grasos omega-3, con un contenido moderado en grasas. El salmón es un pescado azul o graso que aporta unos 11 gramos de grasa por cada 100 gramos de carne, un contenido similar al de las sardinas, el jurel o el atún. La grasa es rica en ácidos grasos omega-3, que contribuyen a disminuir los niveles de colesterol y triglicéridos plasmáticos, y además aumentan la fluidez de la sangre, lo que previene la formación de coágulos o trombos. Por este motivo se recomienda el consumo habitual de salmón a la población general, y en particular en caso de trastornos cardiovasculares. El salmón es una excelente fuente de proteínas de alto valor biológico, al igual que el resto de pescados.

Según informes de la revista Science, los salmones de criadero pueden tener altos contenidos de dioxinas. Los niveles de PCB (bifenil policlorinado) pueden ser hasta 8 veces más altos en los criados que en los salvajes, y el contenido en omega-3 puede ser menor. A pesar de esto, la autoridad de alimentación británica (FSA) recomienda el consumo incluso de salmón criado, pues sus beneficios superan los riesgos. Por otra parte, el salmón es uno de los pescados menos afectados por el mercurio (metilmercurio). Entre las enfermedades causadas por su consumo se encuentra la aparición del Diphyllobothrium nihonkaiense.

La cría y producción comercial del salmón apareció en los años setenta. Según un informe solicitado por la Asociación de la Industria del Salmón de Chile A.G., en 2007 la producción mundial de salmón (tanto silvestre como cultivado) alcanzó los 2,85 millones de toneladas, de los cuales 1,82 millones correspondieron al salmón cultivado. Los mayores productores de salmón cultivado, según el mismo informe, fueron Noruega con un 43,3% de la producción, y Chile con un 36%, seguidos a distancia por Reino Unido con un 7,6% y Canadá con un 6,5%.

Existen diferentes especies.

Salmón del Atlántico

Es la especie de salmón mas conocida, se la llama también salmón verdadero y casi en su totalidad es de cultivo.

Este es el miembro  más grande de la familia de los salmones, los pescadores lo quieren  por su sabrosa carne, que es a menudo de color rojo anaranjado. El salmón común del norte del Atlántico, tiene normalmente 7 kg de peso, pero se han capturado algunas especies de más de 45 kilogramos. El salmón del Atlántico migra a aguas frías dulces a finales de la primavera o principios del verano, y nada corriente arriba a una velocidad media de 6,5 km diarios. Ya que el salmón es capaz de saltar hasta 3,7 m de altura supera, si no todos, casi todos los obstáculos que encuentre en su camino.

La hembra pone hasta 20.000 huevos en octubre o noviembre, tras lo cual los salmones adultos flotan corriente abajo y regresan al mar.

Al contrario que otras especies de salmones, el salmón del Atlántico no muere tras su primer apareamiento, sino que regresa año tras año a su lugar de reproducción. Las crías recién nacidas o alevines permanecen en el agua dulce durante unos dos años. Cuando transcurre este tiempo, los salmones jóvenes, llamados esguines o murgones, que han adquirido un color plateado, nadarán hasta el mar.

Salmón del Pacífico

Los salmones que viven en el norte del océano Pacífico sólo desovan una vez, y mueren tras depositar y fecundar los huevos.

La especie que más se conoce y la más valiosa es el salmón chinook, también llamado  salmón real. Otras especies son el Sockeye, el coho, cherry, rojo, chum y el rosado

Los ejemplares comercializados de este salmón tienen un peso medio de 9 kg, pero muchas especies miden más de 1,5 m de longitud y tienen más de 45 kg. de peso.

El salmón chinook migra a mayores distancias que cualquier otro salmón, recorriendo a veces entre 1.600 y 3.200 km antes de llegar a su territorio de desove.

Sus huevos suelen abrirse en unos dos meses, y las crías nadan hasta el mar cuando alcanzan una longitud de 5 a 7,5 centímetros.


Salmón del Pacífico

Hucho o salmón del Danubio

El salmón del Danubio es la especie Hucho hucho, un pez de agua dulce de la familia salmónidos, distribuidos por el río Danubio y otros ríos de su cuenca hidrográfica, por buena parte del centro de Europa

La longitud máxima descrita fue de 150 cm., aunque la longitud máxima normal es de unos 70 cm. Presenta de 3 a 5 espinas tanto en la aleta dorsal como en la aleta anal, además de los radios blandos.

En España lo conocemos puesto que ha sido repoblado en Salamanca en el río Tormes.


Hucho o salmón del Danubio

Hucho del río Tormes


Nos centraremos en el salmón atlántico por ser el que habita nuestros ríos.

El salmón común o salmón del Atlántico (Salmo salar; o Salmo salar sebago) es una especie de pez eurihalino (marino y de agua dulce) de la familia de los salmónidos, distribuido por el norte del océano Atlántico, tanto en la costa este de Norteamérica como en la costa de Europa, así como por el océano Ártico, el mar Báltico, el mar Mediterráneo y el mar Negro.

Este pez grande y poderoso, que puede alcanzar los 150 cm. de longitud máxima, tiene de 3 a 4 espinas en la aleta dorsal y otras 3 a 4 en la aleta anal, además de numerosos radios blandos. Presenta cuerpo fusiforme, con escamas pequeñas redondeadas. Los adultos, cuando viven en el mar, tienen el dorso de color verde azulado con un recubrimiento plateado y unos pocos puntos pero, durante el periodo reproductor, en agua dulce, pierden la cubierta de camuflaje plateada y se vuelven de color marrón rojizo a verdoso, con un moteado rojo a naranja, muy patente en los machos. Por el contrario, los alevines que descienden de los ríos (al mar) tienen poco menos de una docena de puntos de color violeta azulado en los laterales, con pequeños puntos rojos entre ellos. También se caracteriza por su carne anaranjada, muy apreciada, color que adquiere en su estado salvaje por los diferentes moluscos y crustáceos de los que se alimenta.. La cabeza es pequeña en proporción al resto del cuerpo.





Son peces de aguas frías y anádromos, que viven en el mar cerca de la costa y remontan los ríos cuando llega la hora de la reproducción, para desovar en la cabecera del río. La mayor parte de sus vidas la pasan en agua dulce cuando son pequeños: hasta seis años pueden pasar en el río, para después descender al mar, donde permanecen menos de cuatro años hasta la edad de reproducirse.

Se ha comprobado que los adultos reproductores regresan al mismo río en el que nacieron y pasaron sus primeros años de vida, donde se reproducen, y vuelven a descender por el río hasta el mar y, aunque algunos mueren en esta migración, la mayoría sobrevive para volver al año siguiente, a una nueva reproducción. Su gran olfato les permite encontrar el camino hasta el río donde nacieron, y se abren paso contra la corriente. La hembra deposita los huevos en el lecho del río, en fondos arenosos, poco profundos, en aguas movidas y con oxígeno.

Los alevines, en el río, se alimentan fundamentalmente de insectos acuáticos, moluscos y crustáceos, siendo esta una fase de crecimiento lento. Los adultos, en el mar, se alimentan de calamares, gambas y peces, siendo los ejemplares de gran tamaño depredadores de grandes peces marinos, que les proporcionan un crecimiento muy rápido durante su fase marina; los adultos que remontan los ríos para reproducirse no se alimentan durante su migración.




Fuente: Wikipedia y elaboración propia

Un barco de Burela coge y libera un caballito de mar






Los tripulantes del pesquero de artes menores Sempre Xiana se llevaron ayer una sorpresa cuando izaron a bordo un caballito de mar vivo. El ejemplar fue «capturado» involuntariamente por la embarcación de Basilio Otero, patrón mayor de Burela.

Cuenta que es el primero que «pesca» en sus 29 años en el mar. Lo devolvió al Cantábrico. Esa especie, en peligro de extinción, suele vivir en aguas más cálidas que las de A Mariña lucense.



Fuente: La Voz de Galicia

Al pulpo gallego le quedan trece días






El aficionado al pulpo gallego ya puede ir pidiendo raciones grandes de aquí al día 20 para quitarse las ganas durante mes y medio. Eso es lo que finalmente durará la veda del cefalópodo en Galicia, que arrancará justo en trece días. Tras un tira y afloja con la Administración -que porfiaba en que el recurso, para recuperarse bien, necesitaba tener lejos las nasas durante al menos 60 días-, el sector consiguió convencer a las autoridades de Mar y a sus técnicos de que 45 jornadas con los aparejos en seco eran suficientes para fortalecer el stock.

Y lo hizo poniendo sobre la mesa la evidencia empírica y los datos estadísticos: que ahora mismo el pulpo goza de buena salud, que se esta extrayendo en cantidad, que las embarcaciones están cubriendo el cupo y que, además, los precios medios que obtienen son estupendos. Así que ya duele bastante poner ahora punto y seguido a la campaña, como para, por encima, prolongarla más tiempo de lo deseado.

Si es o no la duración realmente necesaria, «¿quen sabe?, dice José Manuel Rosas, patrón mayor de Bueu. Como responsable de una de las principales cofradías polbeiras, de la que el cefalópodo sale «con garabata» que lo certifica como Polbo de Rías, conoce bastante a ese animal de ocho tentáculos está «moi pouco estudado» y que ha dado sobradas muestras de que es de lo más imprevisible «en todos os aspectos». Puede que se conozca que de esas ocho extremidades seis son patas y dos son brazos -así lo ha concluido una investigación realizada en 23 acuarios europeos-, pero nada se sabe acerca del motivo por el cual hoy no se encuentra uno en el caladero y en una semana el mar esté plagado de ejemplares.

Rosas admite que los primeros meses después de la veda no fueron «nada bos», pero se veía bastante cantidad de cría. Y así fue que la pesquería fue mejorando poco a poco y así es que ahora hay pulpo de todos los tamaños: «grande, mediano, pequeno e pequeniño, co que se espera que á volta da veda a campaña sexa boa».

Así que dentro de escasas dos semanas comenzará el trasiego de nasas para tierra. Allí permanecerán hasta el 4 de julio, fecha en la que volverán a mojarse para permitir el regreso del pulpo gallego al mercado.

Este año, a diferencia de ejercicios anteriores, la reapertura de la campaña de pulpo no coincidirá con la de la nécora. Tradicionalmente, crustáceo y cefalópodo reestrenaban juntos la temporada. Sin embargo, este año habrá tres días de diferencia, aunque dos coinciden con fin de semana. La veda de la nécora se levantará el 1 de julio, tal y como estaba previsto en el plan xeral de explotación marisqueira de este año, mientras que la prohibición de extraer pulpo se acabará el día 4. Así que, si el primero de julio entra el cefalópodo en el aparejo largado para la nécora, tendrá que ser devuelto al mar, puesto que seguirá estando en veda.

Ahora bien, todo esto es lo que acordó el viernes pasado la comisión de seguimiento del plan del pulpo. Está por ver si la letra de la resolución que dicte Mar lo recoge tal y como se acordó, puesto que «non sería a primeira vez que poñen ‘oído o sector’ e despois nos deixan coa boca aberta», apuntan desde las cofradías.



Fuente: La Voz de Galicia

sábado, 7 de mayo de 2016

Lamprea: feo pero exquisito bocado ancestral



Es el pez más antiguo del planeta. Los romanos la convirtieron en delicia gastronómica y diseñaron los "pescos", que aún se conservan, para su captura en río. Arbo (Pontevedra) es su cuna.



Ejemplar de lamprea recién capturado, un manjar para el paladar



Surgió hace 400 millones de años, dato que avala su DNI como el pez más primitivo del planeta y el único considerado prehistórico (fue el primero en desarrollar una estructura de espinas y aletas radiales y lobuladas). Anterior al dinosaurio, la lamprea es, sin duda, un pez con personalidad: de tonos grises, negros y amarillos y con forma cilíndrica, esta pieza antediluviana y no evolucionada carece de escamas, se distingue por su boca en forma de ventosa (a su vez, con un pequeño pico central para chupar la sangre de sus presas), es mala nadadora y tiene fobia a la luz.



Los "pescos" construidos por los romanos, son multipropiedades hereditarias



Nacida en el río, una vez desarrollada llega al mar, donde vive entre dos años y medio y cinco años, para regresar a las aguas dulces de donde procede con el objetivo de desovar y morir, en el justo momento para convertirse en objetivo de captura. Y, durante toda su existencia, este auténtico chupóptero nace y crece parasitando a otros peces, a los que, como una vampiresa acuática, chupa la sangre para alimentarse. Con una peculiaridad: es un animal exquisito, ya que le gustan las aguas limpias y huye, en cambio, de los ríos contaminados.

A 110 metros sobre el nivel del mar, está la meca de la lamprea: Arbo. En este pueblo de 3.700 habitantes situado en la provincia de Pontevedra, a 50 kilómetros de la costa (con Vigo como capital más cercana) y a 556 de Madrid, nos esperan Loló y Cordobés, que año tras año bajan al río a cumplir un rito entre febrero y mayo. Su destino es el Miño (y sus afluentes Deva y Cea), que, con un cauce de hasta treinta metros de profundidad en su parte central, separa Arbo de Portugal, justo enfrente y unido por un puente construido en 1998, hito que cambió la vida a una localidad convertida históricamente en eje comercial de intercambio con el país vecino, gracias a su localización fronteriza, rol impulsado, además, por el ferrocarril.



Imagen del río Miño, a su paso por el pueblo de Arbo, y de sus viñedos, sus bodegas están adscritas a la Denominación de Origen Rías Baixas


Esta ubicación atrajo a los romanos, auténticos descubridores del sex appeal de la lamprea. Con el fin de capturar estos peces de fea apariencia (que después trasladaban en ánforas a Roma, donde se convertían en bocado de emperadores y se conservaban en viveros), inventaron unas estructuras de piedra construidas entre los siglos XII y XIII. Se instalaron en puntos estratégicos de la orilla (elegidos para provocar la corriente y atraer a estos peces), en sentido oblicuo al río, como bloques paralelos, entre los que se enganchan unas redes de forma cónica (viturón o butrón), que atrapan al pez cuando avanza a contracorriente por la noche y que, al no recurrir al uso de arpones, evitan la pérdida de sangre, lo que ayuda a mantener textura y sabor del pez y eleva su interés gastronómico para convertirlo en manjar. Son los pescos o pesqueiras, todo un símbolo de la cultura del río en la zona y un sistema de captura artesanal made in Arbo. Es una de las artes milenarias con las que se pesca la lamprea en Galicia, única zona de España (con una producción de 10.862 piezas en 2015, en la actividad profesional regulada vía autorizaciones del área de Conservación de Naturaleza de la Xunta) y de las pocas del globo (junto con Portugal o Letonia), en la que algunos de sus ríos siguen albergando lampreas.



Las redes reciben el nombre de viturón o butrón, de forma cónica, atrapan las lampreas desde los "pescos"



Aparte de las pesqueiras de Arbo (donde también se captura con una malla lastrada llamada cabaceira), hay dos sistemas más: en barco con redes de deriva (lampreeiras), en el esteiro del Miño, en su desembocadura en La Guardia; y con fisga (una especie de arpón), desde unas estructuras de madera (estacadas), en el río Tea, en la zona de Salvaterra y Ponteareas (que aglutina 232 pescadores y 88 puestos, de los que este año únicamente se utilizarán 32). A su paso por Herbón (en Padrón), el Ulla también surte de lampreas a través de la captura con redes artesanales (cangallas) desde pesqueiras, con cinco pescadores autorizados en la zona. Es la radiografía global de este pez prehistórico, cuya pesca está regulada en Galicia desde 1980.

En Arbo, el statu quo de la lamprea es una absoluta herencia del pasado: una especie de sector en torno al río Miño, basado en el sistema de pesca ideado por los romanos a partir de los pescos; regulado por concesión administrativa y repartido entre particulares, que han ido heredando, generación tras generación, los derechos sobre estos puestos de pesca. Estas familias se rigen por un calendario que históricamente marca los días en los que cada una puede utilizar los pescos, en realidad, multipropiedades con varios dueños con vez para ir a pescar uno o hasta quince días al mes. Cada propietario puede explotar directamente la pesqueira los días que le toque o arrendárselo a otra persona. En todo caso, no se trata de una actividad profesional, sino que es puro ocio: está regulada como pesca deportiva y catalogada, además, como pesca tradicional o artesanal. Cada pescador tiene licencia para este fin, que debe renovar anualmente y que implica el pago de una cantidad de 30 euros (por propietario en cada pesco).

Este retrato motiva dos características. Una es la falta de control, una libertad atractiva para una actividad de ocio, pero que implica el riesgo de que pueden surgir furtivos dispuestos a pescar en aguas ajenas o a robar las redes llenas de otros. "Cuando pillamos a alguno, llamamos a la Marina o al Seprona", advierten los pescadores más veteranos. Otro rasgo del mercado en este tramo del Miño es la casi imposibilidad de obtener datos sobre un sector de aficionados (eso sí, amateurs muy diestros y realmente vocacionales), que no tienen que estar dados de alta como autónomos y que pescan para autoconsumo (por eso, los dueños de restaurantes tienen pescos propios, que autoabastecen sus cocinas) y, en algún caso, regalan piezas a algún cocinero. En Arbo, la pesca de la lamprea ha sido una actividad históricamente complementaria de la huerta o la actividad vinícola de la zona.

Bajo estas premisas, la lamprea no pasa por una lonja; entonces, ¿cómo se determina cada año el precio? Por la definitiva ley de la oferta y la demanda, que, para 2016, está situando entre 20 y 25 euros la pieza. Cada pez suele pesar entre 1,2 y 1,5 kilos (incluso hasta dos) y medir entre 90 centímetros y 1,20 metros. "Hace muchos años, se llegó a pagar entre 6.000 y 12.000 pesetas el kilo", recuerdan los paisanos.

Pero, en Arbo, una especie de pueblo Twin Peaks a la gallega, entre unos y otros, surgen algunos datos: existen unos 200 pescos activos en el tramo del Miño que ocupa este concello y que suma seis agrupaciones parroquiales (Arbo, Barcela, Cabeiras, Cequeliños, Mourentán y Sela); en cada uno (gestionado por entre dos y hasta 100 pescadores), se pueden capturar hasta 70 lampreas en una sola noche, con entre una y dos redes, una cifra muy por debajo de la habitual centena larga de hace un par de décadas y con el riesgo de hacer ceros alguna jornada. "Una parte muy importante de los vecinos de Arbo son propietarios de pescos en régimen de multipropiedad", recalca su alcalde, Horacio Gil, auténtico valedor de la cultura lampreística.

Son las 20.00 horas y es tiempo de armar los pescos; es decir, de colocar las redes, que los pescadores de Arbo confían recoger con una buena captura al amanecer. Cuando Fuera de Serie visita Arbo, a finales de la primera semana de marzo, la temporada apenas está arrancando: aunque teóricamente empezó el 15 de febrero (se prolonga hasta el 15 de mayo), el temporal de los días previos, que ha generado cuantiosos daños en el pueblo, ha supuesto la crecida del río, con lo que el agua ha tapado la mayoría de los pescos, que, poco a poco, empiezan a asomar para permitir a sus propietarios iniciar la pesca de 2016. Para autoconsumo, regalo o ventas esporádicas, los pescadores son entregados profesionales a la causa común de la lamprea, actividad convertida en reclamo turístico y gastronómico (una docena de restaurantes del pueblo están especializados en este producto), que tiene su principal escaparate en la Fiesta de la Lamprea, que, este año, se celebra el fin de semana del 22 al 24 de abril.



Los pescadores, Manuel Puga, "Loló", (agachado) y JoséManuel Martínez González, "Cordobés", con dos ejemplares de lamprea, en uno de sus "pescos" en el Miño, a su paso por Arbo



De la complicidad entre la lamprea y los vinos del Condado (con 11 bodegas adscritas a la Denominación de Origen Rías Baixas), nació esta feira, declarada en 2005 de interés turístico en Galicia y que aspira a lograr este reconocimiento en el ámbito nacional. "Se forjó en una taberna, en la que hace 56 años unos paisanos de Arbo quisieron dar protagonismo al vino a través de un evento en el que también se comiera la lamprea", explica Horacio Gil.

Los pescadores, auténticos, cazalampreas, son genio y figura. "Pescamos porque nos gusta. No es un negocio. Casi todos perdemos dinero, aparte de los riesgos que tiene bajar al río y de que cada vez hay menos peces", reconoce José Manuel Martínez González, alias Córdobés.

En los últimos años, Arbo ha sufrido un recorte en la pesca de la lamprea, motivado sin duda alguna por la construcción de un salto hidroeléctrico (que implicó la compra de pescos a varios propietarios por parte de Unión Fenosa) y por el aumento de la contaminación del río.



Boca de la lamprea en forma de ventosa para agarrarse a las rocas, con pico central para chupar la sangre de las presas


El plan de saneamiento aplicado a los municipios ribereños ha permitido recuperar la calidad de las aguas y animar la captura de estos peces, al tiempo que existe una acción para restaurar estos históricos y romanos puestos de pesca. "La lamprea forma parte de nuestra cultura, aunque parezca que a las generaciones más jóvenes no les atrae tanto. Este año, la crecida del río vendrá bien para limpiarlo y atraerá lampreas", añade su vecino de pesco, Manuel Puga, conocido como Loló y que, tras desayunar merluza a la plancha y un vaso de vino a primerísima hora de la mañana, acompaña a toda una institución: Alonso Simón, de 82 años.

Apoyado en una garrota, el pescador más veterano de Arbo baja con envidiable agilidad la cuesta que llega hasta el río para saltar sin pestañear a la pesqueira y comprobar que la captura nocturna suma un par de lampreas. "Empecé a venir al río con 11 años. Bajábamos descalzos y era frecuente dormir por la noche en chabolos para ir vaciando las redes que se llenaban mucho más rápidamente que ahora. El río ya no es tan estable como antes", dictamina Simón. Es copropietario en ocho pesqueiras que, según cada caso, le dan derecho a pescar un día, ocho o doce al mes. "Tengo documentación de pescos de 1753", insiste Simón.

En uno de sus puestos, Alonso Simón salta de bloque en bloque de piedra, sin apenas inmutarse. Posa con el pez en la mano, le abre la boca y nos enseña su ventosa. "Arbo es lamprea", sentencia. Pero, como todo pez con personalidad, la lamprea trasciende Arbo: se habla de salmones de Alaska que lucen un chupón de la vampiresa más primitiva.



Lamprea ahumada de tres a siete días con madera de roble o carballo, abierta y sujeta con mimbres



Comprar una lamprea para cocinar en casa es, prácticamente, misión imposible, salvo que se consiga alguna a través de un propietario de un 'pesco'. En Arbo, la cultura en torno a este pez alcanza lo gastronómico, con varias recetas que en este pueblo no dudan en calificar de "ancestrales", conservadas de generación en generación. Son diferentes elaboraciones a partir de este pez utilizado en fresco (conservado en pozos de agua pura instalados en los restaurantes o en casas particulares) o seco y ahumado, lo que permite su congelación para el consumo durante todo el año. Si visita esta localidad, anote esta docena de restaurantes: Casa Grande La Almuiña, Casa Pazos, Casa Barcia, Os Pirús, Mesón da Lamprea, A Rula, A Vila, Casa Cruceiro, Castro, O Barbas, Churrasqería Almuiña y Furancho do Barbas.

En todo caso, el recetario tradicional identifica 7 preparaciones:

Ahumada o escalada y a la brasa. Tras limpiar la lamprea (para retirar el limo o barro), se abre, se sala durante un día y se cuelga para secar y ahumar en un 'fumeiro' (de 3 a 7 días), habitualmente con madera de roble, encina o carballo. Después, esta lamprea fresca y ahumada se puede preparar asada a la brasa de sarmiento (unos 15 minutos), cortada con tijeras en trozos que se asemejan a torreznos. Se aliña con cebolla cruda y un buen chorro de aceite de oliva virgen extra. En Arbo y otros pueblos de la zona, equivale al perfecto acompañamiento de un vino para disfrutar de pie en la barra de una taberna y comerla con la mano y un trozo de pan, todo un exquisito manjar. La otra opción es congelarla una vez ahumada (envasada al vacío), lo que garantiza su conservación durante meses.

A la bordelesa o al 'estilo Arbo'. Receta más conocida y de apariencia no siempre atractiva: la lamprea (mejor, las de menor tamaño) se cocina con su propia sangre (por eso, siempre debe usarse el pez en fresco en este caso), además de vino blanco y tinto, cebolla, pimentón, laurel y pimienta blanca. Se acompaña de arroz blanco y picatostes.

Con fideos y tirabeques. Es una forma de guiso para comer con cuchara, que se suele preparar con lamprea seca y ahumada (puede estar previamente congelada o no).

Rellena. Da lugar a una especie de embutido de río: un rollo de lamprea ahumada, jamón, huevo duro y, a veces, pimiento morón, cortado en lonchas. La empresa Obrador de Lamprea comercializa esta receta envasada.

Frita. El pez ahumado se reboza con huevo y harina y se fríe.

Empanada. Se puede hacer con lamprea seca y ahumada o fresca (esta última es una elaboración que resulta más fuerte de sabor).

Cocido. En la zona de Arbo, este pez se suma al largo listado de ingredientes de un cocido gallego (en donde la lamprea resta protagonismo al tradicional cerdo).



Fuente: Expansion.com