sábado, 5 de octubre de 2013

Zamora: Los tramos libres de pesca de trucha se convertirán en cotos de pesca de pago



Un pescador suelta una trucha capturada en el Tera



Ningún pescador se llevará en adelante una trucha para casa sin permiso previo, de salir adelante la propuesta de convertir los tramos libres en «Cotos en Régimen Natural». Es una de las propuestas remitidas a algunos consejos de Pesca de la comunidad, ya celebrados, y se teme que también ocurrirá lo mismo en Zamora, donde tiene previsto reunirse para mediados de este mes.

Los pescadores, tanto con muerte como sin muerte, y especialmente los ribereños que durante toda la historia han gozado del aprovechamiento piscícola ofrecido por los ríos que recorren sus pueblos, están más que inquietos por los significativos cambios propuestos a algunos consejos provinciales para la temporada del próximo año, ante la entrada en vigor de la nueva Ley de Pesca que se halla, actualmente, en sede parlamentaria. La nueva normativa está previsto llevarla a Pleno de las Cortes, para su aprobación, en la sesión de los días 22-23 este mes y, se prevé, que esté vigente a finales de este año.

Los cambios propuestos, en tanto se aplica la nueva Ley, suponen, entre otros, que los tramos que hasta ahora eran libres, pasarán a ser cotos con muerte, recibirán el nombre de «Cotos en régimen Natural» y serán regulados mediante permisos de pesca. Otro de los cambios afecta a los cotos que durante años han funcionado en régimen de sin muerte, que pasarán a ser considerados cotos con muerte, lo que es considerado por los pescadores de esta modalidad como «un verdadero disparate» por cuanto que va contra la conservación de la vida piscícola.

Tanto pescadores que devuelven las capturas como los que las llevan para su degustación en la mesa coinciden a la hora de considerar que uno de los motivos de estas modificaciones «es sacar pasta. En el caso de convertir los tramos sin muerte en zonas con muerte porque, según aficionados a esta práctica, la Administración quiere ofrecer los tramos conservados y con posibilidades ante los escasos o nulos resultados de las zonas libres y de los cotos. Y en el caso de sacar permiso para las zonas tradicionalmente libres porque es un mazazo para los ribereños, que ya solo podrán llevarse alguna pesca para casa con un permiso que, se teme, costará un dinero.

Estas propuestas han sido trasmitidas a los consejos provinciales celebrados hasta la fecha, como el de León, pero se teme que también se hará llegar al consejo de Pesca de Zamora, cuya celebración está prevista próximamente.

Las propuestas a los consejos se efectúan para elaborar la normativa anual que regirá en la temporada del año 2014, y dicen basarse en los principios de la nueva ley tocantes a que «en las aguas en las que haya especies de interés preferente (trucha común) la modalidad de pesca será, con carácter general, sin muerte; y en que se ha de realizar una reclasificación de las masas de agua».

No obstante, mientras se implantan los preceptos establecidos en la nueva Ley, los promotores consideran «sensato que, transitoriamente y hasta que se elabore la nueva zonificación, será preciso mantener una oferta de pesca con muerte para dar respuesta a la demanda existente en las zonas donde tradicionalmente se ha practicado esta modalidad». Quieren así, según exponen, «minimizar la conflictividad social que una aplicación taxativa de los preceptos de la nueve ley pudiera generar».

Las propuestas concretas son «mantener los cotos actuales y la posibilidad de transformar el régimen de aprovechamiento de cotos sin muerte en cotos con muerte, con la denominación de «Cotos en Régimen Natural», en los casos que técnicamente sea posible, regulados mediante permisos de pesca y en los que se permita la pesca con muerte». También «crear cotos con muerte en tramos que hasta ahora son considerados libres, con igual denominación de «Cotos en Régimen Natural» y regulados con permisos de pesca» y, asimismo, «establecer Aguas de Régimen Especial en los tramos que técnicamente sea posible y con cupos acordes a la potencialidad del tramo».

Aunque todavía se desconoce el contenido de los aspectos a tratar en el Consejo de Pesca de Zamora, la línea marcada en otras provincias hace prever que seguirá la misma tónica. De seguir los mismos pasos, el pescador José García, de San Ciprián de San Justo, que gusta de disfrutar de las zonas libres, coincide con otros pescadores en el afán recaudatorio de la Administración. «Están tratando de que no salgan los pescadores. El pasado año subieron el coste de la licencia una salvajada y tratan de que no se vaya al río. Si hay que sacar permiso para las zonas que eran libre, entonces que lo coten todo» manifiesta.



Dos pescadores prueban fortuna en la tablada del Tera a su paso por Puebla




El presidente de la Asociación de Pesca Sanabria-Carballeda, Manuel Mateos, dice ver bien que los vedados pasen a cotos, pero rechaza la creación de los «Cotos en Régimen Natural» de las zonas libres si están sometidos a permisos de pesca que perjudicarían, especialmente, a los ribereños que gustan de disfrutar de unos lances en los ríos que pasan por donde habitan. «¿Van a pescar solo los ricos, y los ribereños nos dedicamos a mirar o a decir dónde están las truchas?, se pregunta.

Esta Asociación, que destaca por su defensa de los pescadores ribereños y por la mejora y conservación de los ríos, ha entregó más de un millar de firmas contra la nueva Ley de Pesca.

Los pescadores destacan el incremento que se aplicó el pasado año a la licencia de pesca, que duplicó su coste, y son generales las críticas vertidas sobre la escasez de trucha en los ríos, así como al cierre de no pocas piscifactorías y al estado que presentan los cauces por causa de las vertidos, la falta o mala depuración y la carencia de limpieza. Joaquín de la Mata, que practica la pesca sin muerte, teme que haya «un rebrote del furtivismo» y considera que la supresión de las zonas sin muerte va contra la conservación sostenible. «No podemos entender las propuestas que se han aprobado a favor de una drástica reducción de sus poblaciones de peces a través de la práctica de una pesca extractiva que cada vez menos pescadores practican, ya que cada vez son más los pescadores conscientes de que este tipo de pesca va en contra de sus propios intereses y, por lo tanto, en contra de los intereses de un colectivo cada vez más comprometido con la conservación del medio ambiente, de los ríos y de sus ecosistemas» expresa en una carta remitida a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente.

«Todos somos conscientes que la progresión de afecciones que sufren los ríos han mermado su capacidad de regeneración. Ante esta situación cada vez más acuciante, la elaboración de una ley de pesca basada en la conservación de las especies y tratando a la trucha como especie de interés especial, ha sido una esperanza para los pescadores en la confianza de que la administración daba pasos en la conservación y por lo tanto en la mejora de la pesca como actividad recreativa. Pero las noticias que nos llegan en el sentido de eliminar muchos tramos de pesca sin muerte para convertirlos en zonas de pesca extractiva, no son nada alentadoras» señala.

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