Se cerró la
temporada de pesca del salmón con un saldo en el río Ulla de doce salmones
capturados. Una cifra por debajo de los 16 y 17 de los dos últimos años y que
tampoco fueron buenos.
El último,
lo pescó el estradense Esteban Tato, el pasado día 28. Fue en el coto de
Ximonde y a cucharilla. El cupo máximo era de cincuenta salmones y se quedó muy
por debajo en ejemplares pescados.
Si el número
de capturas fue escaso, tampoco el tamaño de los ejemplares pescados fue para
tirar cohetes, ni mucho menos, y la media no fue muy grande, tampoco el peso.
El experto estradense, Salvador Ortega, explica que hay que irse bastante atrás
en el tiempo para recordar una buena temporada de capturas. En los ríos
gallegos la temporada fue también bastante desastrosa, muy lejos de la de
Asturias, donde se cerró la campaña con 833 capturados frente a los 490 del
pasado año, lo que supone casi duplicar el número. Un crecimiento que se dio en
los ríos donde más repoblaciones se llevan a cabo y que parece ser el secreto
de este éxito. Una fórmula que se conoce, pero que no se acaba de aplicar con
la suficiente fuerza.
Fuente: La
Voz de Galicia
No hay comentarios:
Publicar un comentario