La pasarela colgante sobre el río Ulla en el coto de Ximonde -entre el Concello pontevedrés de A Estrada y el coruñés de Vedra- estará terminada antes del inicio de la próxima temporada de pesca del salmón, que se abrirá en el mes de mayo. Así lo confirmó el director xeral de Conservación da Natureza, Ricardo García-Borregón, que ayer visitó las obras del nuevo puente en compañía de los alcaldes de los Concellos que unirá la infraestructura, José López y Carlos Martínez. Según indicó García-Borregón, las obras van por buen camino, por lo que se espera que se cumplan los plazos previstos. No obstante, la agilidad de los trabajos -realizados por la empresa Tragsa- estará condicionada por la meteorología y por las crecidas del río en los próximos meses. En este momento están prácticamente concluidos los dos pilares que servirán de apoyo a la estructura.
La estructura de la nueva pasarela colgante de Ximonde destacará por su flexibilidad. Ha sido diseñada así para garantizar que resiste las riadas. Será metálica atirantada de modo que contará con dos cables para tirar del mástil.
De esta manera, será flexible y no rígida como su predecesora, cuyos extremos reposaban en dos estribos sitos en las ambas orillas del río. Precisamente esta característica de la vieja pasarela, mucho más elemental en su construcción, le confería una rigidez que ofrecía gran resistencia al paso del agua. Y de ahí que no resistiese la fuerza del río con las importantes crecidas que se registraron en diciembre del año 2001.
Con esta experiencia como ejemplo negativo, para las administraciones quedaba claro que había que optar por una estructura diferente. De ahí que se proyectase construir una estructura flexible cuya menor resistencia a la fuerza del agua y al peso que soporte. De este modo, se moverá en función de la fuerza del río y del peso que soporte. Paradójicamente, esa flexibilidad le conferirá una mayor durabilidad al hacerla más adecuada para resistir las riadas.
La nueva pasarela peatonal sobre el río Ulla que se está construyendo el coto salmonero de Ximonde tendrá una longitud de 87,70 metros y un ancho de 2. Tendrá accesos peatonales con escaleras y también rampas adaptadas para discapacitados a fin de que también estas personas puedan disfrutar de la pasarela colgante.
La plataforma estará suspendida a unos 8 metros de altura libre sobre el río si bien esa cifra es aproximada ya que oscilará en función del peso que soporte en cada momento, debido al paso de usuarios por la pasarela.
Esta contará con un pavimento peatonal cuyo ancho útil se elevará a 1,86 metros de ancho. Este pavimento estará formado por losetas de caucho sobre hormigón armado de 20 centímetros de grosor. Además, para rematar la nueva pasarela se instalará una barandilla de pletinas metálicas verticales, con pasamanos de madera.
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