Voces en favor de la comercialización del salmón

Antonio Caldevilla, junto al río Sella a su paso por el área de descanso de El Portazgo, entre Cangas de Onís y Parres

Antonio Caldevilla nació en 1949 en la Vega de Los Caseros (Parres) y a los siete años pasó los cien metros que separan esta localidad de la canguesa de Villanueva. Empezó a pescar con diez u once años, «con doce ya pescaba salmones con la caña de un vecino», recuerda. Fue emigrante durante muy poco tiempo en Bruselas, la capital de Bélgica, de donde regresó pronto porque «me llamaban la novia y la pesca». A su regreso, empezó a pescar normalmente y entró a trabajar en el Ministerio de Fomento. Ahora, tras casi cuarenta años, asegura tener «mucha gana de jubilarme». Caldevilla hizo sus pinitos en la política y fue concejal en Cangas de Onís por el PP. Ahora está afiliado a Foro Asturias y conserva «amigos en todos los partidos, no me estorban las ideas de nadie». Hace veinte años fundó la sociedad de pescadores «El Esmerillón», que preside desde entonces.

-¿Qué normativa de pesca fluvial esperan para la temporada de 2013?

-Los rumores que tenemos es que va a ser mucho más restrictiva que la de este año, con restricciones de 2010 y 2011. Como primero no estábamos de acuerdo, no íbamos a estar ahora. No podemos afirmar nada y las declaraciones que hizo estos días la Consejera tampoco nos disgustan. Dijo que iba a ser de consenso pero, ¿con quién?, ¿con todos o con sus afines?

-En «El Esmerillón» han preparado su propio borrador de la normativa, ¿cómo es?

-Es un borrador muy abierto, sin fechas ni cupos porque son cosas a pactar, pero sí fechas de apertura y cierre, cebos y demás. Y alguna sugerencia que hacemos, pero no pusimos cuántos salmones, porque eso lo vamos a negociar.

-Ya se pueden solicitar los cotos de pesca.

-Lo estamos haciendo mal. Se puede hacer la solicitud de los cotos y no sabemos normativas ni cupos ni nada. Ahí hay que meter dinero que no se te va a devolver, un coto de primera cuesta sobre 110 euros. Si es tan restrictivo y vuelven con tres salmones al año como en el 2010, o pesco en los cotos o pesco en los libres...

-¿Está de acuerdo con el modelo de licencias y cotos establecido hasta ahora?

-Estoy en contra de los cupos, pero, de poner uno, que sea por río, no personal, porque en el momento en que se alcanzara un cupo quedan todos en el río, como está en Cantabria. Y si es por persona, no debía ser nunca anual, sino semanal.

-Defienden, además, que ese cupo no logra el objetivo de conservar el salmón.

-El cupo de tres salmones al año no tiene que ver para dejarlos en los ríos. Sí tiene que ver el cupo por río, con el que los salmones quedan allí, que es lo que pretenden. Que tampoco hay que sacar sesenta, este año era una cosa muy lógica, dos a la semana. Que me digan por qué se restringió tanto, porque no hubo ningún estudio que dijera que con esos recortes iba a ver más salmones.

-En la piscifactoría llevan a cabo repoblaciones de trucha y reo, ¿les gustaría que se hiciera lo mismo con el salmón?

-Sí, queremos que se coja un porcentaje de salmones para que desoven artificialmente, siempre hay que tener un seguro para que no rompa el eslabón de la cadena en caso de inclemencia meteorológica.

-Hay argumentos en contra, que defienden que la repoblación se haga de forma natural.

-Si el hombre no hubiera metido la mano en la naturaleza no hacía falta, pero ya la metimos y no la podemos sacar, lo tenemos que regular. La gente de libro no quiere que se repoble, pero si ya rompimos ese ciclo natural tendríamos que ayudar de todas las formas que podamos.

-¿Qué le parece la pesca sin muerte?

-No la entiendo, martirizar a los peces, matar peces y no aprovechar nada, me parece absurdo.

-¿Qué opina de quien culpa a los pescadores de los daños en la fauna ribereña?

-Deben saber que hay más problemas en los ríos que los pescadores. Hay muchísimos más factores: la polución de los regueros, los cormoranes y hay muchísima nutria, que quiero que se proteja, pero que no llegue a ser una plaga como la que casi hay ahora. Si es que quieren los peces para los depredadores naturales, que nos lo digan así de claro. El depredador malo y dañino es el pescador y yo lo tengo que defender. Voy a seguir defendiendo que podamos estar todos en el río, pero sí me pongo como un gato panza arriba si nos echan la culpa de todo, no puedo permitir que se nos eche la culpa de todo y que tengamos que dejar de pescar por esas otras causas. No pido que se termine con nada, pero que se regule todo, no sólo a los pescadores.

-¿Cómo afecta la normativa fluvial a la economía de la ribera?

-La pesca del salmón y el bienestar del deporte de la pesca no afecta sólo a los pescadores. Hay comercio, cañas, bares, hoteles, cuanto más recorten, más economía quitan de la ribera. Tengo varios hosteleros apoyándome porque pido que sea un poco más abierta, así viven todos.

-¿Qué opina de la posibilidad de comercializar el salmón?

-Estoy totalmente de acuerdo, es una gastronomía de ribera, igual que se hace con los corderos. La comercialización del salmón no tenía por qué estar prohibida, luché cuando se prohibió, sabemos todos que para regalos se siguen vendiendo. No es para vivir, pero el que saque un salmón no hace ningún sacrilegio si lo vende, sería una ayuda para mucha gente que hoy está al paro. Podría ser un complemento a la economía de la zona, que no es sólo la del pescador, sino la hostelería. No iba a haber más furtivos, los salmones de los furtivos no se ven.