Lo último: Helado de percebe

La conselleira Beatriz Mato no se resistió a probar el helado de percebe

Aunque celebraciones gastronómicas como la del percebe de Aguiño, en Ribeira están más que consolidadas y año tras año repiten éxito de participación, no está de más añadir a estas citas un toque de innovación, que, en el caso del crustáceo ribeirense, ayer dejó pasmado a más de uno. Y es que este preciado manjar de la costa barbanzana es la base de un helado que se sirvió en la edición número 17 de la fiesta.

Toda una sorpresa para el paladar a la que no pudieron resistirse ni la conselleira Beatriz Mato, encargada de inaugurar la Festa do Percebe de Aguiño, ni el alcalde de Ribeira, Manuel Ruiz Rivas. No fueron los únicos que se dejaron llevar por la curiosidad y el helado de crustáceo, que además se servía en una original lata con el lema «Barbanza sabe a mar», resultó todo un éxito.

No menos aceptación tuvo, por supuesto, el crustáceo cocinado en agua de mar, a la manera tradicional. Las expectativas de la organización, que por primera vez corrió por cuenta del Concello de Ribeira, se vieron cumplidas y se sirvieron unas 2.200 raciones de marisco.

Pasaba del mediodía cuando se dio por iniciada la fiesta, y en apenas media hora ya costaba encontrar un hueco en la carpa instalada en la explanada portuaria para la ocasión. Entre los comensales, la opinión sobre los percebes que se sirvieron era unánime: «Están buenísimos, en su punto». Y quienes participaban en la cita gastronómica por primera vez anunciaban que volverían: «Repetiremos seguro, e traeremos con nós a máis amigos».

Más allá de lo estrictamente festivo, la celebración también sirvió para rendir un pequeño homenaje a los dos patrones mayores que llevaron a esta cita gastronómica hasta donde está: Andrés Monteagudo y José Manuel Oujo.