Agustín Hernández, en el centro, firmó ayer el convenio en Santiago |
Ya sabemos el destino de los 265.000 euros que la empresa Ferroatlántica deberá de pagar por resolución judicial al haber vaciado el embalse del Xallas. Así a simple vista, me ofrecen serias dudas de la utilidad, pero bueno, no voy a opinar de lo que no conozco en profundidad. Muchos son estudios, y ya sabemos el pozo sin fondo que es eso, y otras son actuaciones casi innecesarias. Pero en fin, vayamos con las intenciones.
Se destinará a distintas medidas de mejora en el cauce del Xallas e impulsar el coto de pesca de ese río. Esa cantidad se corresponde con la sentencia impuesta a la empresa en su día por la mortandad de peces del 2007. Ayer el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, firmó el convenio con la Federación Galega de Pesca y responsable del club Salmo para canalizar esa inversión a la mejora del acotado.
El objetivo de la inversión, siguiendo el dictado de los jueces, es «promover actuacións e proxectos que permitan asegurar a reparación do equilibrio ecolóxico perturbado». Con ese fin trabajarán desde las agrupaciones de pescadores, informan desde la Xunta.
Los fondos se dedicarán fundamentalmente a la elaboración de estudios previos al inicio de la próxima temporada de pesca. Así, se hará una evaluación de la población de peces, un análisis de presión antrópica, otra de carácter socioeconómica del área acotada, un diagnóstico global del espacio y un plan de gestión adecuado para el tramo fluvial.
Dentro de los trabajos previstos se realizará también un seguimiento con toma de datos en cada temporada de la expedición de permisos, así como encuestas entre los usuarios. También se investigará el grado de ocupación del hábitat mediante radiomarcado de ejemplares y la realización de muestreos periódicos. Se estudiarán también cada año las densidades biológicas del cauce, la estructura demográfica y los crecimientos y tasas de supervivencia de las especies, entre otras cosas.
La inversiones se completan con el establecimiento de un plan de vigilancia en la parte del río afectada por el coto. Asimismo, instalarán señales informativas y actuará sobre el entorno «para favorecer o achegamento e coñecemento do río», algo que se hará mediante la apertura y conservación de sendas, pasarelas y puntos de acceso adecuados para los pescadores y visitantes.
También se eliminarán en lo posible las barreras que reducen la movilidad. Todo ello se completará con una intensa campaña informativa que incluirá la impresión y distribución de trípticos sobre el coto.
Augas de Galicia será el organismo que tramitará todas las actuaciones previstas, mientras la dirección xeral de Conservación da Natureza se hará cargo de la dirección y seguimiento de los trabajos en el ámbito de sus competencias.
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