El grupo BFA-Bankia pedirá al Estado una ayuda pública de 19.000 millones de euros para poder seguir adelante. Esta cifra se une a los 4.465 millones que ya ha inyectado el Estado, y convertirá la operación en el rescate más costoso de la historia financiera española, con más de 23.400 millones de euros. La cifra sorprende por lo elevado de la cuantía, que excede con mucho a los 15.000 millones de euros que el ministro de Economía, Luis de Guindos, dijo que aportaría para todo el sector en su conjunto.
Los 19.000 millones serán utilizados para cumplir con los requerimientos de provisiones y de capital que exigen las dos reformas financieras aprobadas por el Gobierno desde que llegó al poder. Además, servirán para tapar los agujeros detectados en la matriz del grupo, Banco Financiero y de Ahorro, precisamente por la elevada valoración de su filial Bankia, que, según los auditores, no se ajustaba a la realidad.
La matriz tenía valorada su participación en la filial en unos 12.000 millones de euros, cuando su valor a precios de mercado es de menos de 1.500 millones. A los 19.000 millones se añaden los 4.465 millones en participaciones preferentes que tenía el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), y que se convirtieron en acciones, lo que permitió al Estado hacerse casi con el 100% de BFA.
La nueva petición de inyección pública se ha conocido tras un consejo de administración de la entidad en que se produjo la renuncia masiva de dieciséis consejeros, los procedentes de las cajas de ahorros que dieron lugar a Bankia. Además se conoció un nuevo dato sobre el agujero de la entidad, ya que tras reformular sus cuentas, Bankia admite que cerró el 2011 con unas pérdidas de 2.979 millones de euros.
En el nuevo consejo de Bankia entran José Sevilla, persona de confianza del nuevo presidente, Jose Ignacio Goirigolzarri, y que ocupa el cargo de Director General de Presidencia. Se incorporan también como consejeros independientes el vicepresidente de Ferrovial Joaquín Ayuso, la expresidenta de Merrill Lynch en España, Eva Castillo, el socio de la auditoría PwC, José Wahnon, el presidente del grupo de restauración Zena, Javier Campo, el presidente de la empresa de transporte Alsa, Jorge Cosmen, y los economistas Fernando Fernández y Jose Luis Feito.
Todos los nombramientos, que se han producido por cooptación, deberán ser refrendados por la junta de accionistas de Bankia que se celebrará en unas semanas. Sólo permanecerá un miembro del antiguo equipo, el director general Francisco Verdú.
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| Ya lo anticipaban, todos lo pagaremos |
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