jueves, 9 de enero de 2014

El temporal en Galicia, "anomalía excepcional"


Galicia sufre desde mediados de diciembre una sucesión de frentes con alertas por olas de gran altura y vientos y precipitaciones fuertes. MeteoGalicia achaca esta situación a una "anomalía excepcional" en la circulación atmosférica a la que atribuye los dos frentes que se encadenaron en las últimas semanas. Los efectos del temporal aún persisten y por ejemplo el día de Reyes en cabo Silleiro se registraron olas por encima de los 11 metros. El próximo frente llegará el domingo pero "con menos intensidad"





Klaus, Gong o Petra son algunas de las ciclogénesis explosivas que barrieron a Galicia en los últimos años. Las pasadas navidades el temporal Dirk dejó vientos por encima de los 136 kilómetros por hora, 268 rayos y una sucesión de borrascas y alertas que continúan este 2014. Fenómenos de este tipo en los que se unen dos masas de aire -una de aire cálido y húmedo tropical marítimo y otra de frío polar- son "habituales" durante el invierno, según destacan desde MeteoGalicia. Pero lo "excepcional" de los temporales que azotan la comunidad desde el pasado 16 de diciembre es "el elevado número de borrascas continuadas y la prolongación de su incidencia".
Para el meteorólogo Lino Naranjo esta situación obedece a "una anomalía" en la circulación de la atmósfera, lo que en su opinión también explicaría que en la costa este de Estados Unidos empezasen el año con temperaturas a 50 grados bajo cero, unos valores que no se registraban desde hace dos décadas. "Afortunadamente no nos ha tocado a nosotros y nos hemos movido en registros suaves para esta época del año", señala Naranjo. En cuanto a la incidencia de los temporales añade que Galicia es "la puerta atlántica" para la entrada de las borrascas, lo que explica que sea la primera zona donde impactan los frentes "con más intensidad". Añade que por eso también se han registrado más alertas en comparación con otras comunidades, ya que a medida que las borrascas avanzan por la Península pierden fuerza. Debido a que se trata precisamente de "anomalías", aclara que no se puede predecir qué tendencia se va a seguir en lo que queda de estación.
Y tampoco vincula este temporal que se prolonga durante más de dos semanas al hecho de que el pasado verano haya sido especialmente "seco". "La atmósfera tiene muy poca memoria. Lo que ya ha pasado tiene muy poca influencia en lo que va a pasar", insiste.




La incidencia del temporal se dejó notar también en Reyes. La boya de cabo Silleiro batió el lunes su récord histórico con una ola de 11,5 metros. Pero fue en A Costa da Morte donde se han detectado, en los últimos tres lustros, los casos más espectaculares. Desde Puertos del Estado confirman que en la estación de cabo Vilán, la altura del oleaje llegó a alcanzar los 13,5 metros, lo que implica olas individuales superiores a 20 metros. Un poco por detrás se queda la boya de Estaca de Bares, aunque la cifra también es significativa: unos 12,9 metros. MeteoGalicia predice para lo que queda de semana una situación intermedia ante la llegada de una nueva borrasca el domingo, pero "de menos entidad" sin que haya que activar alertas.
El temporal que puso en alerta roja el litoral gallego el día de Reyes dejó un registro récord en la boya de Puertos del Estado de cabo Silleiro, situada a unos 45 kilómetros de la costa pontevedresa, donde las olas llegaron a alcanzar "del orden de 20 metros", según señala el Ministerio de Fomento, que las compara con "el equivalente a un edificio de siete plantas". Desde que está operativa, y ya van 15 años, esta boya, referencial en las Rías Baixas, nunca había arrojado mediciones semejantes. En esta ocasión, la altura significante del oleaje -la media del tercio de las olas más altas registradas, que es la usada como referencia por la entidad portuaria- fue de 11,5 metros, un dato constatado el pasado 6 de enero en torno a las 14.00 horas en cabo Silleiro. Para que la media ofrezca esa magnitud, Puertos del Estado estima que la altura máxima alcanzada por olas individuales habría rondado los 20 metros. Este resultado pulveriza el récord anterior de la boya, que se situaba en 11,1 metros de altura media del oleaje, anotado el mismo año en que se colocó el dispositivo, en 1998. Ni siquiera la ciclogénesis explosiva Klaus, cuando se contabilizaron 10,96 metros de alto, superó a aquel primer temporal ni mucho menos al que acaba de azotar la costa gallega. Tampoco se alcanzaron los once metros en las otras dos mediciones que encabezan los oleajes más significativos de cabo Silleiro: 10,87 metros en marzo de 2008 y 10,84 en noviembre de 2010. Para el físico gallego Gabriel Rosón la medición registrada en cabo Silleiro no resulta extraordinaria. Se trata, subraya, de "fluctuaciones naturales". "Igual que unos años toca que haga más calor, este año ha tocado más oleaje", señala.

 

4 comentarios:

  1. Hola amigo, gran artículo recopilatorio de lo que viene ocurriendo en aguas gallega últimamente. Yo también pesco como Usted y desde hace unas semanas me estoy preguntando sobre el efecto de este caos climático en las futuras poblaciones de róbalos y no lo tengo nada claro. ¿Tiene Usted alguna opinión al respecto?. En mi opinión, por las menores capturas sobretodo de pesca profesional puede venir bien por dar un pequeño respiro a las lubinas y a otras especies azotadas por la sobrepesca. Por otra parte, no se qué harán los peces en este bullicio mar...

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. Hola. Comparto su opinion. Los peces no tienen problemas con este mar. Al contrario tienen mas comida y como Vd. bien dice, se sacuden por unos dias de la presion de la pesca profesional. Lo malo es que tambien se sacuden de la pesca deportiva. Yo el futuro lo veo bastante negro, puesto que ya no se pesca ni la decima parte que hace unos años. Eso quiere decir que cada vez hay menos peces en el mar

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estoy de acuerdo, el futuro es negro y el presente muy gris oscuro. Razón, el egoismo brutal de la pesca profesional. Aunque nos tengamos que sacrificar sin salir a pescar los deportvos, también los exterminadores no saldrán y eso puede beneficiarnos a corto o largo plazo. Un afectuoso saludo, compañero.

      Eliminar