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| El armador condenado tiene antecedentes que lo vinculan con actividades de pesca ilegal |
La Audiencia Provincial de Las Palmas de Gran Canaria condenó al armador Manuel Antonio Vidal Pego, de Ribeira (A Coruña), por el delito de estafa.
La sentencia establece que el estafador deberá estar en prisión durante un año y ocho meses, y abonar durante ocho meses una multa diaria de 15 euros.
Además, deberá indemnizar a la empresa Coast Line con 2,74 millones de dólares, más un 10% de dicha cantidad en concepto de lucro cesante.
"Manuel Antonio ocultó al representante de la entidad Coast Line el hecho de que el buque Hammer, que había procedido a la captura del pescado objeto de la compraventa, había sido avistado por las autoridades australianas por faenar en la zona del convenio para la conservación de los recursos marinos vivos de la Antártida", dice la sentencia.
Y añade: “Teniendo el convencimiento de que la entrega de la mercancía pactada con Coast Line iba a resultar, con certeza, imposible, oculta estos datos a Luis Suárez, representante de Coast Line, en la operación de compraventa y, con intención de beneficiarse económicamente, procede a requerir el pago del precio restante a esta última fecha", informó la agencia Europa Press.
Vidal Pego ya contaba con antecedentes de pesca ilegal: en 2003 fue condenado internacionalmente por desarrollar esa actividad a bordo del buque Viarsa.
En noviembre de 2009, el PSdeG exigió a la Xunta de Galicia explicaciones por la concesión de 3,9 millones en ayudas públicas a la empresa Biomega Nutrición, propiedad del empresario.
El dinero otorgado a la firma tenía como destino la construcción de una fábrica de producción de ácidos grasos omega-3 de aceite de hígado de pescado.
En abril de 2010, la organización conservacionista Oceana acusó al Gobierno gallego de subvencionar con 4,02 millones de euros a dicha compañía “estrechamente vinculada” con la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (IUU).
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