martes, 1 de noviembre de 2011
Cascos crea la figura del maestro del río
El presidente del Principado de Asturias nunca ha ocultado su pasión por la pesca del salmón ni su devoción hacia los ribereños. Quizá por ese motivo la nueva normativa de pesca para 2012 ha incorporado la creación de una figura, la del maestro del río.
A la espera de que sus competencias se desarrollen en el reglamento de la ley de pesca fluvial, la normativa publicada en el BOPA recoge que ejercerá funciones de “enseñanza, vigilancia y asistencia” a los pescadores. En cuanto a los requisitos para alcanzar el título de maestro de río, la normativa solo recoge que habrá un sistema de selección, así como un régimen de dedicación y retribuciones que “serán desarrollado por el correspondiente estatuto profesional”. En cuanto a su actividad el principado apuesta por vincular los futuros maestros de río con las asociaciones de pesca colaboradoras de la administración regional , a las que se propone ceder “uno a dos cotos de gestión para prácticas y autofinanciación”.
Estaremos atentos a esta nueva figura que nace en el mundo de la pesca.
Por su parte la Consejería de Agroganadería y Recursos Autóctonos destacó que para la nueva normativa escuchó las propuestas de 17 asociaciones de pescadores, y que ha llegado a acuerdos con Galicia y Cantabria. En un comunicado, el Gobierno regional ha indicado que ha aceptado peticiones de Las Mestas del Narcea, El Esmerillón, Fuentes del Narcea, Amigos del Nalón, La Socala, El Maravayu, Real Asociación Asturiana de Pesca Fluvial y de la Federación Asturiana de Pesca.
A su vez el Gobierno del Principado de Asturias, tal y como recalcó el consejero Albano Longo, ha puesto en marcha tres acciones: Plan de erradicación del furtivismo, plan de eliminación de los focos de contaminación en los ríos y colaboración con organismos internacionales para la recuperación de las poblaciones de salmón.
Longo recordó que solicitó propuestas y sugerencias para la elaboración del borrador. El borrador elaborado por la Consejería tenía como objetivo un reequilibrio de las zonas vedadas, zonas libres y zonas acotadas, y de las modalidades de pesca en los ríos salmoneros y trucheros asturianos, tal y como recogía el programa electoral de Foro Asturias.
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