Increíble, en Galicia falta agua (con lo que ha llovido este año)

El río Touteiras, entre Peitieiros y Morgadáns, bajo mínimos

La escasez de agua todavía no es alarmante en Gondomar, pero el gobierno municipal busca ya soluciones a un posible episodio de emergencia. La más sencilla pasaría por un trasvase desde el embalse de Baíña, en Baiona, a la red de suministro gondomareña. El alcalde, Fernando Guitián, anunció ayer que solicitará en los próximos días a su homólogo baionés, Jesús Vázquez Almuiña, la firma de un convenio para echar mano de las reservas de su presa en caso de necesidad. Y el regidor vecino se muestra dispuesto a colaborar siempre que "quede garantizado el consumo" en su municipio.

A Baiona le sobra en la actualidad un recurso que Gondomar puede necesitar en cuestión de unas jornadas. El embalse de Baíña se encuentra al 95% de su capacidad, mientras que el río Touteiras, del que la villa condal capta el agua de la traída municipal presenta un nivel muy bajo en relación a las abundantes lluvias de la primavera. La reciente ola de calor disparó el consumo en el municipio condal, circunstancia que contribuyó a reducir el volumen del cauce junto a las altas temperaturas.

Por eso el alcalde emitió esta semana un bando en el que pide un consumo responsable del agua a los vecinos para evitar males mayores. Por el momento no se prevén cortes en el suministro, pero fuentes municipales han afirmado que si se agota el depósito, apenas quedará agua para un par de días. En este sentido, Guitián insistió ayer en hacer un llamamiento a los gondomareños para que supriman el gasto innecesario de agua. "No vamos a prohibir el riego porque los vecinos son muy responsables y estoy convencido de que solo regarán en caso de necesidad", indicaba. El Ayuntamiento ya ha establecido sus prioridades y ha limitado los baldeos de calles y el riego de zonas verdes.

La presa de Baíña, ayer, prácticamente llena

La conexión con Baiona sería la opción más inmediata y fácil de ejecutar. Así lo confirma un informe de la concesionaria del saneamiento y el abastecimiento en ambos municipios, Espina y Delfín, recalca el alcalde gondomareño. Bastaría con colocar una tubería y una válvula en Borreiros para enlazar ambas redes de suministro. La instalación estaría dotada de un contador, subraya Guitián. "Está claro que si precisamos agua de Baiona la tendremos que pagar", apunta.

La comarca ya tiene experiencia en este tipo de trasvases. Baiona recibió agua de Vigo en dos ocasiones a través de la red de abastecimiento de Nigrán. La primera se produjo durante diez días de octubre de 2010 por la sequía y la segunda, de junio a octubre de 2011, tras unas obras para las que fue necesario vaciar el embalse de Baíña. El ayuntamiento baionés abonó en torno a 6.000 euros por la primera conexión y 81.000 por la segunda.

Gondomar ve en el enganche con Baiona un remedio provisional a su problema, pero no una solución a largo plazo porque carece de una reserva estable de agua. Existe un proyecto de dotación de un depósito conectado con el embalse vigués de Zamáns que Augas de Galicia dejó en suspenso en varias ocasiones. Guitián no descarta solicitar a la Xunta retomarlo para garantizar el suministro.