Durante este fin de semana, Arbo hace gala de su manjar por excelencia en la XVIII Festa da Lamprea Seca e do Peixe do Río Miño. Este evento gastronómico engloba varias actividades: rafting, canoa o la concentración de coches antiguos, son sólo un pretexto para degustar este plato tradicional.
El termómetro marcaba ayer 35 grados. Las calles de Arbo estaban desiertas. La villa evocaba la imagen de un pueblo andaluz en pleno verano. Pero la sombra de la Carballeira de Turbela servía de refugio y de espacio de acogida a los visitantes de la XVIII Festa da Lamprea Seca e do Peixe do Río Miño.
El pistoletazo de salida del evento, el cual se celebra a lo largo de este fin de semana, tuvo lugar ayer, a las diez de la mañana, con un paseo junto al Miño, con actividades como rafting o canoa.
A las 11.00 horas, se inauguró la muestra gastronómica, en la que participaron varios restaurantes arbenses.
El plato fuerte, la lamprea, se podía degustar de varias formas: rebozada, asada, rellena y en empanada. Un manjar que ya apreciaban los romanos y que fue acompañado por vino de la comarca, D.O. Rías Baixas.
Además de agradar paladares, la fiesta acogió la concentración y exhibición por las parroquias, de coches clásicos, a la que el presidente del Club Gallego de Automóviles Antiguos, José Luis Blanco, acude desde hace más de 20 años, ya que le agrada "este sitio, el paisaje y la gente". Tras degustar una vez más la lamprea, José asegura: "es un plato que debe figurar en los menús de restaurantes con cinco estrellas Michelín, se considera que tiene menos clase, pero no es cierto".
El alcalde de Arbo, Xavier Simón, subrayaba que la lamprea seca "tiene un valor diferente, es históricamente exclusiva de la localidad". El regidor también destacó el acontecimiento como una oportunidad para impulsar la economía del municipio mediante las exportaciones: "hoy hemos tenido una visita por parte de empresas intermediarias de EE.UU., que comercializan vino, lo cual es positivo en materia de promoción en el extranjero".
El consejero de la ciudadanía española en Brasil, José Vidal Rivas, también visitó esta fiesta gastronómica.
Después de probar la lamprea José, que vive en la ciudad de Salvador da Bahia, señalaba la intención de fomentar el vino de la región en Brasil.
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