Malpica quiere recordar su historia con una obra que fue clave para su desarrollo: la construcción del dique del puerto para dar abrigo a las embarcaciones de esta pequeña localidad marinera, que todavía mantiene esa tradición. El 19 de marzo se cumplirán ochenta años desde el comienzo de esas obras, las primeras de otras muchas reformas que fueron sucediéndose a lo largo de los años.
La Asociación Cultural Caldeirón quiso rememorar este acontecimiento con una exposición de fotografías antiguas, con la colaboración del profesor Xurxo Alfeirán, que comenzó una labor desinteresada en los años ochenta para recuperar la memoria del pueblo. La muestra fue inaugurada ayer en el mercado municipal, donde se podrá contemplar durante las próximas semanas. La exposición recoge las instantáneas más significativas de la época, sobre todo las relacionadas con el mundo del mar, como las viejas embarcaciones utilizadas por los marineros, descargas de pescado o las tradicionales fiestas en honor a su patrona.
Además de la muestra fotográfica, se presentó el libro O mar e a memoria: expediente Armesto, del investigador Xavier Redondo Aval. La publicación, aparte de las vivencias de la represión franquista, recoge la importancia vital del puerto en la historia de Malpica. El autor narra como una noche de mar embravecido del año 1932 los marineros tuvieron que levantarse de sus camas y coger las embarcaciones rumbo al puerto de A Coruña para evitar que fuesen engullidas por el mar, poniendo en peligro sus propias vidas. Esa noche fue clave para la reivindicación del dique y las obras comenzaron al año siguiente. "Malpica no se entendería sin el puerto" admite el presidente de Caldeirón, Paco Souto.
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